Si hay algo con lo que alucino verano tras verano es con las novedades en cuestión de maquinas depilatorias.
El año pasado os hablé de la Silk-épil 7 Skin Spa, que depila, se puede usar bajo la ducha y traía cepillo facial.
Pues bien, este año nos vamos al más difícil todavía con la Braun Silk·épil 7 Bonus, que hace todo eso y además viene con un cepillo facial independiente. Vamos, para que tengas en casa todo lo necesario para un ritual de belleza completo.

Al paso que va la tecnología, dentro de unos años me imagino a la depiladora mirando cada mañana tus piernas en la ducha y diciendo… ¨Quieta, no te muevas, tienes un pelito en la pierna derecha¨.
Hasta que esto llegue podemos usar la Braun Silk·épil 7, que por cierto os diré que es una maravilla.
Mi tolerancia cero al dolor y yo la hemos probado con muy buenos resultados, ni un solo gritito de dolor.
Es fácil de usar, elimina hasta los pelos más pequeños, que se van viendo muy bien con la luz que incorpora.

Además de todo esto trae cinco cabezales extra, uno para perfilar, otro para las zonas sensibles, facial, posicionamiento. Y para acabar lo que os decía antes, el cepillo de limpieza facial.
Este está siendo el año de los cepillos faciales, muchas marcas ya cuentan con uno. Y la verdad es que os recomiendo usarlos, eliminan muy bien el maquillaje y las impurezas dejando la piel perfecta en cosa de un minuto.
El que viene con la depiladora todavía no he tenido tiempo de usarlo, pero yo diría que es muy similar al cepillo de limpieza de Olay del que os hablé en otra ocasión.
Pequeñito, ergonómico, fácil de usar y con púas suaves, os hablaré de él más adelante.

¡Ay!, que se me olvidaba comentaros que la Braun Silk-épil 7 Bonus Edition también trae unas toallitas que preparan la piel para la depilación, son de Olay.
Os la proponemos para el día de la Madre, y es que más completa no puede ser, seguro que a la destinataria le hace muchísima ilusión.
La podéis encontrar ya a la venta por unos 180 euros.
