Breve crónica y fotografías de la Folixa Antroxera:

El pasado lunes, en el centro social Sextaferia, la gente de la editorial Glayíu y la del periódico Diagonal organizaron una particular Folixa Antroxera, a la que tuve el privilegio de asistir para leer unos poemas, junto a Pablo X. Suárez y Arma X.Me lo pasé genial. Pero antes, en otro bar, en el 4.70, una chica me pregunta: ¿Y tú de qué vas disfrazado? Así que le dije: De nada, yo ya voy disfrazado todos los días. A lo que respondió: Pues pareces un cazarrecompensas...
En esta foto estoy con Dani, editor de Glayíu:

La chica, con la que aparezco en la foto, va siempre en silla de ruedas. Para mí fue una de esas agradables sorpresas de esta Folixa Antroxera y te diré por qué... Hace un tiempo yo estaba en el aeropuerto de Palma de Mallorca. Me dirigía a la puerta de embarque cuando vi a esta chica a un lado de la puerta de embarque para Asturias, en su silla de ruedas, y ella, al verme, me preguntó: ¿Tú eres David González? La miré y le dije: Sí...Entonces me preguntó: ¿El poeta?...A lo que respondí: Sí... No recuerdo ahora mismo de qué me dijo que me conocía. El caso es que la gente ya estaba embarcando y a ella, que tenía que haber sido la primera pasajera en embarcar, la tenían allí esperando. Así que cuando me acerqué a la puerta de embarque le dije a la tía: Oye, a ver si avisas a alguien, que tenéis ahí a una chica en silla de ruedas que tiene que embarcar...Luego la vi ya en el avión y...¡¡¡el lunes escucho una voz que me dice: Hola, David, ¿a que no te acuerdas de mí? Hay que decir siempre la verdad: Pues la verdad es que no y menos así disfrazada... Y me dice: Palma de Mallorca, en el aeropuerto... Bueno, estaba genial con su disfraz, que simboliza el matrimonio entre la parte masculina y de la femenina de uno mismo...

A esta chica la conocí allí, Ana creo que se llama, pues para los nombres mi memoria es un auténtico desastre:

Había representantes del cristianismo:

A ver si tu memoria es mejor que la mía: ¿Cómo se llaman los dos de esta foto:

En resumen: ambientazo y buen rollo. Como siempre tendría que ser:

Otra crónica y más fotos pinchando sobre el siguiente enlace:
Glayíu Editorial