Lo cierto es que pese a las criticas de cuatro perras viejas amargadas, sus ventas se cuadruplicaron, y no es de extrañar, ya que en realidad, nos dio lo que queríamos y nosotras se lo compramos, por supuesto.
No me digáis que ninguna ha soñado con un momentazo así, con el chulazo de turno literalmente a vuestros pies, y vuestros pies en las zonas claves del chulazo, porque sois unas mentirosillaaaas.
Pues bien, para la campaña de otoño/invierno de 2012 lo volvieron a hacer ¡Y yo sin enterarme!
Esta vez, sin tirar de rostros conocidos, pero con la misma formula que auna oscuridad, fetichismo, posesión y zapatos de marca.
Sinceramente, me encanta.
Dejando a un lado lo fácil que es vender las cosas haciendo referencia al sexo y los diez bocatas que necesita cada modelo; la campaña, su estética, la fotografía y los zapatos elegidos creo que son realmente buenos y sobretodo, que funcionan en conjunto.
Imagino que como siempre, la polémica se habrá servido en bandejas grandes, pero ¿sabéis? nosotras, animalillos mentales y sentimentales, con deseos y pasiones oscuras encerrados muchas veces bajo llave por vergüenza, somos en muchos casos peores que los hombres. Y eso, los publicistas lo saben y por supuesto, lo explotan.
¡A mí me parece una forma genial de desearos un gran finde!
Besitos que hacen ruidito al andar...