Bruce Springsteen (2016) Santiago Bernabéu. Madrid

Lugar: Estadio Santiago Bernabéu. Madrid
Fecha: 21 mayo 2016
Asistencia: 55.000 personas
Precio: 88 euros
Músicos: Bruce Frederick Joseph Springsteen Zirilli (voz, guitarras y armónica), Garry Tallent (bajista), Max Weimberg (baterista), Roy Bittan (piano y sintetizador), Steve van Zandt (guitarras, mandolina y coros), Nils Lofgren (guitarras y coros), Soozie Tyrell (violín y coros), Charles Giordano (teclados y órgano), Jake Clemons (saxo)...
Bruce Springsteen en Madrid: el río que nos lleva y la vida que nos queda
Estaba pensando cómo empezar esta mierda y he concluido que lo más sano es no pensarlo. Así que nada, os voy a contar varias cosas, partiendo de la premisa de que nos conocemos, nos respetamos y nos queremos. Porque si ayer estuvimos en el Bernabéu compartimos un código y yo quiero disfrutar escribiendo esto y rememorando con el personal lo vivos que estamos.
Parece una locura pero hay que rememorarlo, sobarlo, tocarlo, abrazarlo, no sé, todo. Mucha gente junta para ver a Springsteen y eso es como una boda gitana. Hay que besar mucho, tocar mucho, mirar mucho a los ojos, querer mucho. Yo os quiero a todos, incluso a los que no os pongo cara. Para el resto, los que me saben, besos rusos en la boca. Es Bruce, ¿bien?
Porque vamos a ver me tuve que escapar de una comunión que es la mayor farsa imaginable, para acudir corriendo a la única liturgira real, que al final termina siendo el maldito rocanrol. Es una imagen de la vida misma, pues vivimos sometidos bajo estupideces supinas cuando en realidad lo que importa se escapa a los estándares de la gente de bien. Es una pena por ellos, pero el regocijo propio es demasiado divertido.
Yo me siento apasionadamente vivo en 'Badlands' y 'My love will not let you down'. Y si esperas una crónica de esas que te dicen oh el sonido fue horrible en el anfiteatro y oh bla bla y oh buah en fin, que me dejéis en paz. Creo que sois todos una pandilla (respetable) que no siente las jodidas movidas como yo, de manera que aunque compartamos este instante fugaz, es casi mejor que me dejéis en paz. También creo que sois mejores que toda esa mierda en realidad.
Pero una cos antes: el concierto de Rock in Rio Lisboa fue un bajón (crónica AQUÍ). Hablamos de estándares extremadamente altos, de manera que no preocuparse. Pero Madrid es la noche. En esa obsesión de los fans por cronometrar el empeño, diremos que no fue el más largo pero, oh basta, ese derroche hercúleo y maratoniano es locamente fantástico. Dicho lo cual, tenemos todo lo que queremos y más.

FOTOS DE PATRICIA CANOY empieza la historia ya en serio con 'The River Tour' y bueno, algunas de ese disco (hasta siete, ya que es la excusa) como 'The ties that bind', 'Sherry darling' y 'Two hearts', antes de la celebración vital que es 'Wrecking ball' y la intronspección de 'My city of ruins'. Y luego más fiesta con 'Hungry heart', 'Out in the street' y 'The promised land' antes del recogimiento de 'Trapped' y la egregia 'The River'.
'Point Blank', por mucho que se flipen los fans, termina resultando un bajoncete ante 55.000 personas (igual tiene razón el chaval en su apuesta de no tocar el disco entero en estadios europeos), aunque la historia levanta con 'Downbound train', 'I'm on fire', 'Darlington county' y 'Working on the highway'. Todas del Born in the USA de 1984, con dos cojones en 2016, esto es lo que viene siendo un 'toco lo que me la pela y todos a cerrar el boquino'. En realidad el concepto es que no hay concepto y bueno, vale, es que nos vale.
Obviamente esto es censurable, porque al menos la idea de tocar 'The River' entero tenía cierto sentimiento de festejo. Al obviar el concepto original, esto se queda en una gramola de éxitos que, sin tener nada de malo en realidad, tiene todo lo malo que tienen las gramolas. Es fácil, es evidente, es bueno, eso, 'Johnny 99', la enormidad de 'Because the night' (busquen a alguien que reniegue, con dos pelotas), 'Human touch, 'The Rising' y la ampulosidad de 'Land of hope and dreams' como remache.
Entre el despiporre generalizado nadie parece comprender que la que se avecina incluye 'Born in the USA', 'Born to run', 'Glory days', 'Dancing in the dark', 'Tenth avenue freeze-out' y 'Bobby Jean', con las luces encendidas, los pulmones abiertos, los brazos extendidos, los chicos de las cervezas acosados con el debido respeto. Es en este punto en el que me siento plenamente vivo y os quiero abrazar a todos. A todos los que alcance.
Pero nos queda 'Twist and Shout' para aferrarnos a la esperanza de una vida plena, mientras nos escabullimos por la barra izquierda y corremos a una boda que nos ofrece la barra libre del fin de los días y de la que terminaré obteniendo un bis en forma de 'Born in the USA' (micrófono en mano y mejor que no haya fotos). Peeero antes, aquí, en este planeta, suena 'Thunder Road' y desde el fondo del estadio uno se cuadra, levanta el mentón, se saca el corazón por la boca y se lo arroja a la muchachada. Es vuestro, mío no. Yo solo pienso en el río que nos lleva y, sobre todo, en la vida plena que nos queda.