La Comisión Europea valoró ayer los presupuestos para 2015 de los países de la UE y lanzó advertencias sobre el déficit, aunque “rebajando la presión” sobre su cumplimiento, según reflejan los diarios. En el caso de España, Bruselas muestra preocupación por el efecto negativo que la reforma fiscal y las cuentas de las autonomías pueden tener sobre la reducción del déficit público y advirtió del riesgo de incumplir el objetivo fijado para 2015, el 4,2% del PIB. “Queremos pedir a España que especifique qué medidas adicionales son necesarias para garantizar que el objetivo de 2015 sea cumplido y para hacer progresos también en la estructura presupuestaria”, indicó el comisario europeo de Asuntos Económicos y Financieros, Pierre Moscovici. “Para 2015 consideramos que son necesarias medidas suplementarias para lograr el objetivo”, añadió. “Pensamos que hay que ir más lejos en la aplicación de medidas correctivas para los gobiernos regionales que no satisfagan los objetivos del presupuesto que son deseables”, subrayó.
Según Bruselas, el escenario en el que el Gobierno ha basado sus presupuestos es “más benigno” que el que la Comisión considera más probable tanto a nivel de crecimiento como respecto a la deuda. Las dos principales preocupaciones para el Ejecutivo comunitario son el impacto de la reforma fiscal y las cuentas de las comunidades autónomas. Sobre la reforma fiscal, considera que el coste neto “podría ser algo más elevado de lo previsto” y que podría estar “infrafinanciada”. “Las medidas podrían tener un efecto positivo en el empleo, pero su impacto podría haber sido mayor de haberse centrado más en la disminución de los costes de la mano de obra mediante la reducción de las cotizaciones sociales”, sostiene la Comisión.
Respecto a las comunidades autónomas, advierte de “riesgos limitados que pueden obstaculizar el cumplimiento del objetivo de déficit ya este año”, en particular “si las restricciones de gastos planeadas a varios niveles de Gobierno no se materializan como se espera”. Por eso reclama “una visión más prudente sobre la contención del gasto, en particular a escala autonómica y local”, ya que “la aplicación de las medidas correctoras a las comunidades que no han cumplido los objetivos presupuestarios ha avanzado a un ritmo mucho más lento que en 2013″.
Además recuerda que persisten “desequilibrios”, en referencia al desempleo y la deuda. Moscovici insistió en que España debe seguir en el camino de las “reformas ya emprendidas” y recordó que Bruselas mantendrá su vigilancia sobre los “riesgos asociados” a la evolución de estos desequilibrios.
España suspende cuatro de los once indicadores macroeconómicos que analiza la Comisión: desempleo, deuda, pérdidas de cuota de mercado de las exportaciones y posición neta de inversión internacional.
Otros países que podrían incumplir las normas de disciplina fiscal son Francia, Italia, Bélgica, Malta, Austria y Portugal. En el caso de Italia, Francia y Bélgica, la Comisión da tres meses de plazo para pongan en marcha las reformas anunciadas que permitan reducir su déficit y cumplir los objetivos. “La Comisión examinará la situación a principios de marzo de 2015 a la luz de las leyes presupuestarias ya finalizadas y de la esperada especificación del programa de reformas estructurales anunciado por las autoridades nacionales”, señaló Moscovici.