El islamismo radical, tan afin al antisionismo, ha vuelto a dar un zarpazo cercenando la vida de decenas de personas en Egipto.
La prensa de El Cairo informa de que al menos 235 personas han muerto y otras 120 han resultado heridas en el atentado contra el templo musulmán de Al Raudá en pleno rezo central del mediodía, según fuentes de seguridad y del Ministerio de Sanidad de Egipto. Se trata de una de las acciones terroristas más sangrietas registradas en el país del Nilo.
Testigos del ataque citados por la edición digital del diario Al Ahram aseguran que los terroristas hicieron estallar una bomba en la mezquita, adscrita al rito moderado sufí, considerado herético por el salafismo extremista, mientras varios hombres armados abrieron fuego de forma indiscriminada contra los fieles que huían tras la explosión.
Fuente: El Pais