Bryan hible, bryan hible, bryan hible

    Así es, tres veces. Como las veces que necesitan pronunciar para invocar demonios frente al espejo. Sólo que en esta ocasión no estarán ustedes invocando a ningún demonio, sino más bien a un genio. El que escribe esperará hasta las 12 de la noche y se pondrá enfrente del espejo. Mi primera palabra será GRACIAS. Gracias señor Bryan Hible, quien quiera que usted sea por haber nacido, por haber cogido un pincel y haber creado tal gloriosa epifanía del arte. 

    Ustedes, que probablemente se hayan dado cuenta de que el que escribe se está dejando llevar hasta extremos inimaginables, ya se habrán percatado de que estas lineas no tienen más sentido que dar a conocer la obra de este indispensable desconocido, de este monstruo genial, de esta innecesaria vorágine de maestría. Que pena que el que escribe no sea Góngora, que pena que el que escribe no sea Unamuno, porque este castellano no puede describir semejante escalofrío ante tal pericia.
    El que escribe acaba de visitar la Affordable Art Fair de Bristol y ya su vida no volverá a ser como antes. Su vida no fue la misma tras contemplar por primera vez La Anunciación de Fran Angelico en el Museo del Prado y tal vez igual de importante es este giro del destino. El stand de la galería Take to Art sostiene por si sólo todo el armazón de la feria. Sólo por estas joyas merecería la pena visitarla. 
    La fotografía previa ha sido tomada con la cámara de fotos del que escribe. La siguientes pertenecen a la web de la galería Take to Art. 

Bryan Hible, Miss Scarlett with the spanners in the works, Acrílico sobre lienzo.

Bryan Hible, Jack, Acrílico sobre lienzo.

Bryan Hible, Aspirations, Acrílico sobre lienzo.

     Pop, hiperrealismo, arte como juego, EL JUEGO hecho arte, qué demonios es esto ustedes dirán. Esto es valentía, esto es innovación desde el respeto, esto es Magritte, Monks, Hirst y Richard Hamilton todo unido. Esto es una bofetada a la neo-neo-neo-neo abstracción, un corte de mangas al espiritualismo artístico con un nuevo espiritualismo, el nihilista. Las imágenes no hacen justicia a lo que aquella pared sostiene. El que escribe se ha encontrado con Van Eyck comtemplando estas obras y el flamenco ha dicho "Las amo porque son divinamente superfluas". Que grosor, que altaneras y graciosas se erigen. El artista está encantado de conocerse. 
     En Jack, nunca tuvo Jack el Destripador mayor homenaje. Un sombrero, un cuchillo y un lugar. Un visión que se derrama, que no necesita escenario. Aspirations, hiperbarroco, "Así pasa la gloría del mundo" en este Valdés Leal que lo juega todo a los dados. El que escribe no sabe quién es Miss Scarlett pero esa llave inglesa vendría de perlas para los "Water Works" venideros. Bryan Hible dice en su web que la vida es un juego, pues bien, hacía décadas que nadie jugaba tan seriamente. 
    Ustedes, los pocos que leen esto, difundan mi palabra, que no es más que la palabra de un admirador. Difundan esta belleza entre sus familiares y conocidos. Si alguna vez creyendo en el "arte contemporáneo" (etiqueta inconcebible desde antes de existir), si alguna vez pensaron que aún quedan muchas cosas que decir y hacer dentro de las Bellas Artes, no duden en mostrar orgullosos lo que acaban de descubrir. 
    Que el jolgorio siga, por Dios, que siga:
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