Joan, el Grande
Por: Andy Luis LealLos Búfalos de Ciego de Ávila se han coronado por séptima ocasión como campeones nacionales de básquetbol en Cuba tras derrotar 4-1 a los Capitalinos de la Habana en el play off final de la Liga Superior de Baloncesto (LSB), en la Sala Giraldo Córdoba de la capital avileña.
La dinastía de los centrales en el plano nacional continúa. Basados en la excelente defensa de los dos pívots titulares Joan Luis Haití y Vanier Reyes, las rápidas transiciones de su base organizador Yasser Rodríguez, el poderío ofensivo de William Granda y mayor profundidad de la segunda línea, la del banquillo, que salta a la cancha con todo, borraron de la duela a unos desconocidos Capitalinos.
Las lesiones hicieron mella en el rendimiento del equipo del coach Lafertte, ya que dos ilustres veteranos como Eliecer Lima y Orestes Torres no estuvieron a tope en la pelea por el título. Con la baja de Torres los habaneros perdieron las batallas en la pintura, ya que el segundo centro Alorda se vio superado constantemente por Haití (enorme jugador a pesar de llegar fuera de forma a la final) y Vanier.
Pero la nota más decepcionante para los subcampeones llegó en los porcientos de tiros de campo y tiradas libres: por debajo del 50% en todo el play off. Cuando no se contabilizan las penalizaciones al rival muy poco se puede hacer en un deporte tan combativo.
En el segundo juego de la final Capitalinos dejó escapar cuatro tiros libres y dos posesiones para perder el juego finalmente por una canasta. La derrota tuvo nombre y apellidos: Alexis Labastida. Un defensa organizador nunca puede perder la serenidad como en aquella ocasión.
El regreso a Ciego con la serie 1-1 para los Búfalos fue sencillo. Acabar con un equipo rival desencajado e individualista que promedió apenas para 106 puntos en dos partidos. Cifra surrealista si tenemos en cuenta que Wilt Chamberlain registró el solo 100 anotaciones en un partido con Filadelfia en la NBA.
Por encima de las individualidades Ciego fue un equipo, más bien una manada, centrado y capacitado en busca de un objetivo histórico. La séptima corona ya está en el reino de los deportes colectivos en Cuba, a la del beisbol sumémosle esta conseguida y celebrada por toda una ciudad orgullosa de su equipo.