Sólo necesitas fieltro, pegamento de tela o silicona, un poco de cinta, encaje o piquillo (yo puse de este último), un imperdible y unos ojos (que no den miedo, por favor) y, claro, 10 minutos.
Este es el molde que yo utilicé:
Sólo tienes que recortar una pieza de la base, otra para la barriguita y los ojos. Pega los ojos y la barriga encima de la base y luego todo esto sobre un trozo mayor de fieltro. Recorta siguiendo el contorno del búho pero dejando un poco más de medio centímetro de separación para que se vea y contraste el otro fieltro. Repite este último paso con un tono de fieltro distinto pero que coordine. Es decir, necesitarás tres bases de búho cada una un poco más grande que la otra. Pega los ojos y tendrás algo así:
Pega dos trocitos de cinta decorativa en la barriguita y el imperdible y ya está acabado.
Los del comienzo de la entrada los pegué con pegamento de tejidos y el imperdible lo pegué con silicona, pero este último lo hice todo con silicona caliente. Es un búho especial para quienes no saben o no tienen tiempo para coser.
Y como no hay dos sin tres, mañana llega un tablón de corcho con forma de búho.
Pega dos trocitos de cinta decorativa en la barriguita y el imperdible y ya está acabado.
Los del comienzo de la entrada los pegué con pegamento de tejidos y el imperdible lo pegué con silicona, pero este último lo hice todo con silicona caliente. Es un búho especial para quienes no saben o no tienen tiempo para coser.
Y como no hay dos sin tres, mañana llega un tablón de corcho con forma de búho.