Hablabael otro día del concierto de Bunbury en Barcelona... no soy el mayorfan del mundo que tiene el maño, y sin embargo, le respeto y meparece una de las pocas estrellas que tiene el rock n' roll español.Porque puede que gran parte de su propuesta no me guste. Pero el tíotiene sentido del espectáculo, tablas, talento, aunque a veces lomalgaste en tonterías, personalidad y los huevos más grandes que elcaballo de Espartero. Porque sí, porque en un mundo de poses y degente que se vende por un plato de lentejas, una figura como la deBunbury, que se permite el hacer lo que le venga en gana, aunque aparte de su público no le guste, me parece de admirar.
Nuncaseguí con pasión la carrera de Héroes Del Silencio, de hecho,jamás me interesaron hasta el que creo que es su mejor disco,“Avalancha”. Me metí en su música cuando ya se habíanseparado. Esta es una anotación, aún hoy, 15 años más tarde,necesaria, todavía: Bunbury sigue arrastrando una gran masa de fansde su antiguo grupo. Luego publicó un disco que me parecióaburridísimo, su debut, “Radical Sonora”, que aunque supuso unavaliente ruptura con la música con la que hasta entonces se lerelacionaba, no dejaba de meterse en un terreno “de moda”. Fuecon su siguiente disco, “Pequeño”, con el que comencé aseguirle la pista. “Pequeño” me parece un buen disco, conalgunos temas fantásticos, y bastante equilibrado, en general. Eseaño, el ayuntamiento de Barcelona le contrató para las Festes de laMercè, y siendo un concierto gratuito, me acerqué, por curiosear,más que nada. Y suerte que lo hice! Para mi sorpresa, me topé conun concierto estupendo, una buena banda, un cantante que sabía cómoestar en un escenario y cómo llevar un show adelante, y, endefinitiva, me convenció.
Yla publicación de “Flamingos”, con ese acercamiento de nuevo alrock que supuso, acabó por convencerme de que se trataba de alguiena tener en cuenta. En “Flamingos” dejaba de lado tonterías comola electrónica, la copla, la canción mediterránea y todas esasimposturas para centrarse en un disco de rock, lejos de Héroes DelSilencio, pero cerca de Nick Cave o de Bowie... que me aspen si “LadyJane” no tiene una base igualita que el “Space Oddity” delCamaleón.
Luegofueron cayendo otros discos, “El Viaje A Ninguna Parte”,“Hellville De Luxe”, “Las Consecuencias”... en mi opinión,todos sus discos son interesantes, aunque no ha publicado todavía suGRAN disco. Todos sus trabajos son irregulares, pero todos tienenbuenos momentos. No he escuchado “Licenciado Cantinas” (2011), meaburre la vertiente más sudamericana de Bunbury, aunqueprobablemente no sea tan terrible como parece a priori (¿un disco deversiones del cancionero latinoamericano? No, gracias).
Peroinsisto que lo que admiro de Bunbury, además de gustarme parte de sumúsica, es el hecho de llevar ese personaje con todas lasconsecuencias. Sí, me gusta ese Bunbury medio rockero, medio glammy,medio crooner, medio cantante melódico latino. Me gusta que llevelas uñas pintadas y se ponga trajes con llamas bordadas o camisascon chorreras. Me gusta que en el escenario se mueva y actúe como sifuera el Bowie más amanerado o el Elvis más pasado de rosca, o unaversión cañí de Tom Waits. Para ver a tipos que están en unescenario como si estuvieran en la cola del supermercado, me bajo alsupermercado. No basta con componer canciones, también hay quecantarlas, y llevarlas a un escenario. Y ahí, Bunbury puede dar unascuantas lecciones.
Ytambién hay que reconocerle el mérito de deshacer los Héroes DelSilencio cuando estaban en su momento más álgido, y negarse duranteaños a reunión alguna, y a tocar ninguna de sus canciones desdehace más de diez años (al principio tocaba en alguna ocasión “LaChispa Adecuada”, por ejemplo). Cualquier otro hubiera sucumbido ala llamada del dinero y el baño de fama que una reunión de losHéroes suponía, sin haber aguantado tres lustros. Y cuando por finaccede, hace una mini-gira, tan sólo 10 noches, sin canciones nuevasni esas actitudes que suelen estropear las reuniones de bandas. Lofácil hubiera sido hacer una macro-gira de 30 conciertos, y sacar unrecopilatorio con 4 canciones (decepcionantes) nuevas.
Yel concierto de la otra noche, en Barcelona, bueno, me aburrió pormomentos, porque creo que el repertorio no estuvo bien escogido, porbasarse en su mayoría en ese “Licenciado Cantinas” poco rockeroy poco dado a excesos de escenario. Aunque no diré que no lo avisó,desde el primer momento, Bunbury dijo que esos conciertos los basaríaen su último trabajo. Podría decir, no obstante, que el show sesalvó gracias a la fantástica banda que lleva, rock n' roll en todasu esencia, y a su actitud. Que de estar sobre las tablas, el tipo,sabe.
Canciones:
BlackSabbath: “War Pigs”JimiHendrix: “Power Of Soul”FunLovin' Criminals: “Sleepyhead”