Disponía solo de tres horas para correr por esta ciudad que ya tuvo un asentamiento humano en el cerro del castillo que domina la ciudad en el Neolítico (4.500 años a.C). Algo más tarde, en la baja Edad Media el Rey D. Pedro de Castilla establece jornales para los obreros e instaura la reglamentación de los menestrales. Burgos continúa acelerando su historia durante el reino de los Trastámara, participando activamente en el continuo ir y venir de las flotas laneras.
En el siglo XV Burgos empieza a apuntar aires de grandeza. Los Reyes Católicos, en 1494, establecen el Consulado en Burgos, dando a la Ciudad el monopolio para todo el comercio de las lanas castellanas. Algo después después la ciudad cae en la oscuridad, durante el siglo X, y gran parte del siglo XI, hasta 1071.
Es imposible no hablar del Cid que quedó indisolublemente unido a Burgos con la jura de Santa Gadea y el destierro.
Alfonso VIII establece su corte en Burgos y funda en los alrededores el Monasterio de las Huelgas, y comienza la construcción de las murallas de la Ciudad.
Fernando III celebró en Burgos sus Bodas con Dª Beatriz de Suabia. La sencilla catedral románica de Alfonso VI se derriba y en su lugar se levanta el suntuoso edificio gótico que se completará durante largo tiempo.
A partir de este momento, con la Catedral posee Burgos un punto central en torno al cual la ciudad toma su sentido y conciencia de ser. De burgo militar se transforma en burgo mercantil.
Por los caminos van y vienen mercancías, pero también formas artísticas y literarias, El Camino de Santiago fue vital para Burgos en este periodo.
El siglo XIX trae dos acontecimientos: Uno político y otro institucional de vital importancia: La Guerra Napoleónica y las Cortes de Cádiz. Burgos resiste desde su entrada en España y en la Ciudad, a los franceses y soporta durante cuatro años la presencia en su recinto de tropas extranjeras.
En el siglo XIX, Burgos se convierte en capital de provincias, con el Real Decreto de 30 de noviembre de 1834 nace definitivamente la provincia, y como instrumento anejo a ella, la Diputación Provincial, que entra de lleno en la vida administrativa a partir de 1837 La Audiencia Territorial viene a Burgos en 1834.
El crecimiento físico de la Ciudad se orienta en un sentido determinado. Se abandona definitivamente la altura del Castillo, destrozado por las minas y la artillería, e influidos por el gusto de la nueva sociedad decimonónica, que era eminentemente burguesa
El siglo XVI es para Burgos el siglo de plenitud. En los monumentos finales del siglo XV y comienzos del siglo XVI, la Ciudad que había nacido sobre un medio agrícola, vuelve las espaldas al campo y dedica a funciones polarizadas en torno al Comercio. Puede asegurarse que es durante el siglo XVI cuando Burgos explota al máximo las ventajas de su situación y emplazamiento.
A finales del siglo XVI, asistimos a una desintegración de la Ciudad. Las principales causas no fueron, exclusivamente, internas, alcanzaron una categoría superior: Las guerras de Flandes, el descubrimiento de América, el centralismo de los monarcas absolutos agravado con las circunstancias del traslado de la Capital a Madrid. También influyeron otras causas de carácter localista, como las famosas pestes, que castigaron a Burgos, principalmente en el último cuarto de siglo, diezmando su población.
Ya en el siglo XX, la Dictadura de Primo de Rivera, con sus reformas y su inyección momentánea de vida sobre las actividades económicas y las vías de comunicación, conmueven a la Ciudad. Entre otros aspectos Burgos enriquece sus industrias con la instalación, en 1930, de la fábrica de Seda Artificial.
La guerra civil de 1936-39 puso a Burgos en una especial coyuntura, al establecerse aquí el embrión de las estructuras administrativas de los sublevados: inicialmente la Junta de Defensa Nacional, sustituida por la Junta Técnica del Estado tras la proclamación de Franco cómo Jefe del Estado el 1º de octubre, y en 1938 el primer Gobierno del "Nuevo Estado” bajo su presidencia. El último parte de guerra anunciando que "la guerra ha terminado", firmado por Franco, se emitió desde Burgos el 1º de abril de 1939.
En este siglo la ciudad y sus administraciones apuestan, a través del Plan Estratégico de Burgos (2001-2015) por una serie de proyectos y de líneas de actuación decisivas para el futuro de la ciudad en el ámbito urbanístico, económico, cultural y de bienestar social de los ciudadanos.
Ahora mismo Burgos es la única ciudad de Castilla y León cuyo censo de población mantiene una tendencia al alza.
De modo que después de interesarme por esta breve pincelada histórica de Burgos he realizado un recorrido tanto por la zona urbana de la ciudad, el cauce del río Arlanzón y, sobre todo, el Castillo de Burgos y el cerro de San Miguel…
Me llevo una experiencia muy especial de mi recorrido por la ciudad de Burgos donde además pude disfrutar de varios elementos de la naturaleza, viento, frío, sol, lluvia y nieve ...
“Señor caballero, los caballeros andantes han de acometer las aventuras que prometen esperanza de salir bien dellas, y no aquellas que de en todo la quitan; porque la valentía que entra en la jurisdicción de la temeridad, más tiene de locura que de fortaleza.”