Revista En Femenino

Buscarte un sustituto

Publicado el 21 mayo 2014 por Hogaradas @hogaradas

Por Hogaradas
Lo hice Boni, tras tu partida me dediqué a buscarte un sustituto en un intento de paliar el vacío tan grande que me habías dejado. Por lo que he visto debe ser algo de lo más normal, tanto que incluso hay personas que cuando ven que va llegando la hora ya llevan a casa a quien en un futuro cercano les recibirá alborozado a la puerta. Todo es respetable, cada uno gestiona su dolor como puede y en esta vida, como siempre, de lo que se trata es de procurarnos la mínima infelicidad, y eso ya sabes, pocas, muy pocas veces está en nuestras manos, así que cuando es así estamos en todo nuestro derecho de aprovecharlo.
Yo también lo hice Boni, y vi fotos y fotos, y leí historias y me conmoví con ellas y descubrí perrillos preciosos al otro lado de esta pantalla. Pero no encontré en ninguno de ellos tu mirada, ni tus ojos, por más tiernas que fueran, por más necesidad de carińo que transmitieran. No era el momento, no lo es todavía. Descubrí entonces que con esto sucede como con el amor, todo lleva su tiempo y el mío ahora es el de esperar, el de acostumbrarme a tu ausencia y vivir con tus recuerdos, esperar el tiempo necesario hasta que un día uno de esos perrillos que tanto necesitan un hogar me mire y sienta cómo me engancho a sus ojos.
Cómo deshacerte de todos los sentimientos que te produjo un amor cayendo sin dar apenas tiempo en brazos de otro. Cómo conseguir la serenidad necesaria para descubrir toda la grandeza de un nuevo amor si todavía nuestro corazón sigue latiendo por el que no haciendo mucho estaba a nuestro lado.
Cómo, pequeńa Boni, salir alborozada a comprar una cuna, un juguete, un pequeńo cepillo… pensando que no son para ti, que nunca serán los tuyos.
No, no es el momento, pero tenía que contártelo aun sabiendo que si esa fuera mi decisión para sentirme más feliz me habrías guińado un ojo, porque esa era nuestra seńal para hacerme saber que algo te gustaba. Bueno, al menos para mí lo era, aunque hay quien piensa que en realidad veía tu guińo donde solamente había un pequeńo tic momentáneo. Pero me da lo mismo, yo sigo pensando que me entendías y que cuando me escuchabas leerte estas pequeńas Hogaradas y te preguntaba tu opinión la afirmación venía con ese guińo.
Me gustaría saber qué piensas ahora, si te gusta cómo te recuerdo, cómo las historias de nuestros días juntas van saliendo como sabes que siempre decía, como las cerezas, que tiras de una y allá van todas, una detrás de otra…
También Antonio Gala formó parte de nuestras vidas, y en alguna ocasión compartí contigo algunas de esas frases suyas que ya he hecho casi mías. Cuando te fuiste busqué su libro, el de Troylo, intentando encontrar el consuelo en las palabras de quien había expresado de una manera tan hermosa tanto la vida como la muerte de su fiel compańero de viaje. Y lo encontré, mi querido Antonio sabía que no podía fallarme.
Esperaremos Boni, dejaremos que la vida siga su curso y el tiempo pase, y cuando llegue el momento, si llega, estoy segura de que lo sabremos y estaremos preparados ya para comenzar de nuevo.


Volver a la Portada de Logo Paperblog