La vida de un "wedding planner" es complicada cuando ha prometido la boda perfecta a unos clientes muy exigentes, sobre todo como cuando en este caso, el equipo está lleno de incompetentes. La idea es efectiva, el protagonista tiene atractivo e interés, muchas escenas funcionan, entre otras cosas por un reparto muy bien elegido y una buena dirección de actores. El resultado total, es cierto, no es completamente satisfactorio, las situaciones no terminan de convencer con lo que no se crea la empatía ni la credibilidad necesarias para crear emoción, y el humor se queda un poco corto, pero se deja ver, y el final encuentra el tono justo de ternura para dejar buen sabor de boca.Puntuación @cineEnCines: 5/10