Max (Jean-Pierre Bacri) ha organizado cientos de bodas durante años y ahora prepara una boda de lujo en un Chateau francés del siglo XVII. Ha coordinado todo para que la celebración sea un éxito: camareros, orquesta, menú, disc jockey, decoración floral…Pero el resultado pende de un hilo y cada momento de felicidad y emoción puede convertirse en desastre o caos. ¿A quién confiarías la fiesta más importante de tu vida?
La crítica
Cuando en 2011 Eric Toledano y Oliver Nakache dieron al mundo una pieza inolvidable como 'Intocable', la gente pidió más. Primero vino 'Samba' y ahora han vuelto 'C'est la vie!', una comedia que no deja indiferente a su público.
En esta ocasión, los directores franceses nos ofrecen, de nuevo, una obra cómica plagada de buenos gags sobre lo que viene a ser un día de boda vista desde diferentes puntos de vista: el encargado de organizarla, sus trabajadores, el fotógrafo, los novios, etc.
Todo pinta bien al principio pero a medida que el largometraje avanza, los personajes se van desmadrando cada vez más hasta el desastre total. Dando lugar a una película muy entretenida, que nos hace disfrutar, reir y pasar un gran rato de principio a fin, gracias a todos y cada uno de sus elementos, que han sido explotados al 100%. En cierto modo, recuerda a la gran 'Un funeral de muerte' del maestro Frank Oz, por la cantidad de chorradas que puede dar lugar un acto como un funeral o una boda.
Al tratarse de una película con una gran cantidad de personajes, su mayor baza es que todos y cada uno de ellos están perfectamente definidos. Tenemos a Max, alguien firme y con mano dura que pretende llevar la boda a cabo, a Guy (Jean-Paul Rouve), un fotógrafo chapado a la antigua y que ya nadie contrata o un puñado de inmigrantes que son solo peones pero tienen mucho que decir.
Los líos y diferencias de todos los personajes son el motor principal de la obra, dan lugar a cantidad de incidencias que podrán en peligro el éxito de la boda. La cinta nos hará reír en más de una ocasión, alucinar con la de cosas que pueden pasar en una boda o sonreír, con esos momentos más dulces.
Argumentalmente la cinta no tiene más misterio, pero porque tampoco lo necesita: su motivación es robarnos risas y sonrisas. De hecho, trata de abrir un par de hilos argumentales sobre dos o tres personajes en concreto pero los mata sin más y tampoco nos ofrecen mucho, puesto que no se les da especial importancia, tan solo sirve para darle más profundidad a algunos personajes.
Aunque no todo son halagos. Ya sabemos que es una temática explotada recurrentemente en las comedias ('Cuatro bodas y un funeral', 'De boda en boda' o la española 'Tres bodas de más') y no tenemos la comedia del año o una película que vaya a pasar a la historia. Tan solo se trata de otra buena película para poder pasar el rato.
Algo que me pareció curioso es que en un par de escenas, los directores ruedan de la misma manera que el gran Iñárritu en 'Birdman': siguiendo a los personajes y con una única batería de fondo. Es algo que me sorprendió para bien y que le dio un poco más de profundidad en ciertas escenas, sobretodo porque muestra la complicada labor de preparar una boda.
Así que, en resumen: 'C'est la vie!' es una buena comedia para pasar un rato y poder ver con cualquier persona. Como ya he comentado, no es que sea algo nuevo u original pero si una buena película para ver en compañía, que nos hará reír en más de una ocasión y que, al acabar, nos habrá dejado una sonrisa en la cara.
Información de más- Nominada a un Goya por mejor película europea
- La película ha tenido diversos títulos provisionales como 'Le gran saut' (el gran salto) o 'Les temps difficiles' (los tiempos difíciles)
- Algunas escenas fueron rodadas en el área de Fontainebleau, conocida por su hermoso y enorme bosque donde los parisinos suelen escaparse los fines de semana y que antaño fue una de las residencias favoritas de Napoleón
Nota final: 7