Poner en nuestras vidas un cabecero tapizado, con una tela adecuada y una forma original puede otorgar a nuestra habitación un "toque de distinción". Es una buena solución, cuando no encontramos ningún cabecero de madera o de forja, que nos guste. El capitoné vuelve con fuerza...hay que atreverse!!
fuente: Neim Marcus