Cada verano nos toca a todos sufrir la misma película: cabello reseco cual estropajo, puntas abiertas, colores anaranjados... todos los estragos que hace el sol sobre nuestro pelo nos pasan factura, aunque parezca que compense tras largas y divertidas horas de relax en la playa o piscina. Pero al llegar a casa, la realidad nos aterra, y al final del verano no nos queda otra que recurrir al tijeretazo.
Y es que el verano es una de las épocas del año en las que el cabello necesita más atención y cuidados específicos. La exposición diaria a los rayos del sol, el cloro de las piscinas o el agua salada, son factores que alteran la estructura, textura y color del cabello, dándole un aspecto más seco, poroso y quebradizo. Es entonces cuando se precisa de una rutina de belleza que aporte un extra de nutrición, reparación y protección.
Yo, cada verano, recurro a las líneas de cuidado y limpieza del cabello orientadas específicamente a esta temporada del año, y este verano he apostado por la nueva gama de Gliss para cuidado del cabello expuesto al sol. Se trata de 3 productos específicos con tecnología de micro-aceites y filtro UV, 2 champús y un spray reparador.
GLISS OIL-IN-SHAMPOO es una edición limitada de champús específica para verano y diseñada para nutrir y reparar el cabello intensamente. Gracias a su fórmula enriquecida con aceites de cuidado y filtro UV, la nueva línea OIL-IN-SHAMPOO nutre y repara el cabello en profundidad sin apelmazarlo. Su elevada concentración en aceites aporta un cuidado superior respecto a un champú convencional: limpia y nutre el cabello, trasladando los beneficios de los tratamientos GLISS a la comodidad de un champú. Además, su fórmula ligera no solo nutre en profundidad todo tipo de cabello, sino que también mima el cuero cabelludo, sin apelmazar el cabello. ¿El resultado? Un cabello suave, reparado y nutrido con la comodidad de un champú. El champú se puede encontrar en dos versiones, una una de cuidado medio para cabellos expuestos al sol, con aceite de Monoi (Que huele de maravilla!), y otra de cuidado intenso para cabellos dañados, con aceite de marula.
Por su parte, GLISS Sun Repair & Protect es un tratamiento en formato spray sin aclarado, especialmente diseñado para los cabellos expuestos al sol. Gracias a su fórmula con Filtro UVA/UVB, repara el cabello de los daños producidos por el sol, el cloro, la sal del mar y la arena, y protege su color de forma duradera. Además, su práctico formato en spray hace de GLISS Sun Repair & Protect el aliado perfecto para hidratar y proteger el cabello en cualquier momento y lugar. Además, tiene 100 ml de producto, lo que lo convierte en ideal para los viajes de verano en maletas sin facturar, sin que tengamos que prescindir de él
Como veis, una apuesta segura para el cuidado del cabello este verano, por la que yo ya me he decidido y estoy más que encantada con ella.