Cachondeo juridico.

La apropiación del Poder Judicial por el PP, con la inestimable ayuda de PSOE y C’, no solo ha supuesto un duro golpe a nuestra débil democracia, además provoca algunas decisiones judiciales más dignas de aparecer en publicaciones humorísticas que en medios de comunicación serios, hasta el extremo que si no se tratase de un tema tan serio nos haría tronchar a carcajadas.

Para conocer algunos de estos chistes solo se ha de leer cualquier periódico en cualquier fecha. Chistes como el de una señora que estudió en varias universidades, tiene un cargo importante en la fundación de un gran banco, forma parte del consejo de administración de las empresas de su marido, y sin embargo no sabía nada, pero nada de nada, de los negocios sucios de su marido, al que condenan a seis años de prisión, pero a la salida del juzgado le dejan irse a Ginebra, y si algún día deciden cumplir mínimamente la Ley y encarcelarlo ya le avisarán.

Otro muy bueno es el de dos tipos que hicieron un cúmulo de perrerías en un banco semipúblico que hoy ya es público con un coste de varias decenas de miles de millones a nuestro cargo, que emitieron a favor de buena parte de los VIP’s de Madrid unas tarjetas de crédito que les llaman black seguramente porque en la oscuridad de la noche los inspectores de policía y hacienda no las ven, pero después de condenarles a 6 años de prisión, les dejan en libertad ¡¡¡¡ POR SU CONDUCTA INTACHABLE Y CABAL!!!! y quizás algún día les llamen para que se acerquen por la cárcel y pasen en ella un ratito para cumplir de manera intachable y cabal su condena y callar de esta forma las lenguas de doble filo que los criticarán, aunque probablemente les dejen tranquilos para no perder más tiempo, porque a uno de ellos un juez de los que tienen el pésimo gusto de cumplir con su obligación lo mando a la cárcel por otra de sus perrerías y al día siguiente la justicia cachonda lo liberó y sancionó seriamente al indeseable juez que había osado actuar con seriedad.

Y qué decir del de la familia catalana de un ex presidente que durante años han estado llevándose a su casa y a las de sus amiguetes todo lo que pueden pasando por Andorra, Suiza o vaya usted a saber, y a pesar de ello no se ha iniciado todavía ningún proceso legal serio en su contra porque saben mucho y lo podrían explicar y además porque en libertad son mucho más útiles que encarcelados, con los medios repitiendo machaconamente la misma historia hasta dar la imagen que Catalunya es la CCAA más corrupta de España, para buscar los votos de los que dan mucho más valor a pegar duro a los catalanes que a luchar contra la corrupción. Este chiste tiene pinta de durar porque consigue votos para el PP y hace vender muchos periódicos con historias sorprendentes de altos jefes de la policía que pierden y recuperan un pen-drive con información que nadie conoce y que no se sabe de dónde sale y donde va, y otra de una señora que la armó gorda porque le habían grabado una conversación mientras comía y al final de la historia resulta que ella misma encargó la grabación

En la lista de chistes jurídicos hay de todo, desde fiscales que son sustituidos por desobedecer hasta partidos que apoyan al PP para que forme gobierno mediante un pacto que obliga a cesar la corrupción y a perseguirla, y cuando ya están en el gobierno y el corrupto PP continua igual que siempre el partido que le apoya se pone a mirar el cielo y a silbar.

El cachondeo jurídico está siempre mezclado con la política más sucia, y en ocasiones el cachondeo alcanza niveles sumamente absurdos como ha ocurrido esta semana con otro asunto que está en la cúpula del cachondeo: el referéndum en Catalunya. El Consell de Garantías Estatutarias dice exactamente “La jurisprudencia constitucional no reconoce a la Generalitat la potestad de regular ni de convocar una consulta refrendaría sobre el futuro político de Catalunya”, que traducido al idioma corriente afirma que el TC consideró, en la única jurisprudencia existente sobre el asunto, que el referéndum no era conforme a la Constitución, y ante esta afirmación los unos dicen que el Consell está prohibiendo el referéndum y los otros dicen que les da igual, que ellos siguen.

La realidad es que el Consell no ordena ni obliga solo aclara, indica y avisa de algo que la Generalitat ya había dicho que pasaba y seguía con lo suyo, y en esta ocasión podían haberse referido a que no precisan más aclaración a su actitud manifestada cuando el TC emitió su fallo.

El Consell de Garantías se incluía en el Estatut que se cargó el PP con su recurso, pero precisamente el recurso del PP modificó sus dictámenes que pasaron de obligatorios a consultivos, y los mismos que no admitieron la obligatoriedad de sus dictámenes son los que ahora consideran este dictamen como obligatorio.

El cachondeo que está en la cúpula de la falta generalizada de seriedad es el asunto del referéndum, sobre el que sigo opinando que si Rajoy lo hubiese aceptado después de su reunión con Mas en el 2012 y lo hubiese preparado medianamente bien habría ganado el NO a la independencia y nos habríamos ahorrado años de estupideces que han empeorado el problema en vez de solucionarlo, y en vez de eso un TC a la orden del PP y presidido por uno de sus miembros con carnet, parió el invento de que nuestra Constitución lo prohíbe porque establece la unidad de España, exactamente igual que los países donde se han celebrado este tipo de referéndums, y con sus decisiones a la orden nos aleja cada vez más de una solución razonable.

En realidad el cachondeo no está en la justicia sino en todo el sector público de España.