Un jugador del Stoke City será sentenciado a cadena perpetua por haber matado a su novia de 60 puñaladas. Se trata de Andrew Hall, de sólo 18 años, que confesó delante de la policía que había matado a su pareja por una pelea. Fueron unas 60 puñaladas repartidas por el cuerpo de la chica. Hasta hoy, Hall había negado la situación hasta que un testigo aportó datos clave que lo comprometieron. El juvenil estaba a punto de firmar contrato profesional con el Stoke City.