Los recientes resultados de la Encuesta de Servicios Municipales del Ayuntamiento, arrojó datos que reflejan la caída a mínimos históricos del sentimiento de pertenencia a Barcelona por parte de sus ciudadanos.
Una de las respuestas más impactantes es que el 29% de los encuestados confiesa que preferiría vivir fuera de Barcelona, si tuviera los medios y la posibilidad de cambiar de residencia.
Comparativamente frente a los resultados de la encuesta en 2015, el 69% de la población barcelonesa entrevistada en ese entonces, declaró que su lugar preferido de residencia era el barrio donde habitaba.
Durante los últimos años esta cifra no ha dejado de caer.
El sondeo hecho en 2022 reveló que el sentimiento de pertenencia de los barceloneses hacia los barrios en que habitan cayó a niveles nunca vistos. Para este año el porcentaje registrado fue de un 52%. En este orden de ideas, el porcentaje es 17 puntos menor que hace siete años.
Esta cifra alcanza el mínimo histórico desde 1996.
Pobre sentimiento de pertenencia a Barcelona
El querer vivir fuera de Barcelona es un sentimiento que cada día crece más entre los ciudadanos.
El 29% de encuestados que manifestó su deseo de irse, resulta el segundo dato más elevado de toda la serie histórica.
Para 2015 era otro el panorama, pues apenas el 15% de ciudadanos manifestaban en esa época no querer vivir en la capital catalana. Pero el incremento es indudable.
Por otra parte, en la encuesta reciente de 2022, un 18% de ciudadanos respondió que les gustaría vivir dentro de Barcelona, pero en otro barrio diferente del que residen. Esta cifra tampoco tiene precedentes.
El distrito donde menos quieren vivir
Ciutat Vella es el barrio donde menos quieren vivir sus mismos habitantes. De hecho, el 63% de los ciudadanos de este distrito quisieran irse a vivir a otro lugar dentro de la ciudad (38%) o incluso, irse fuera de Barcelona (25%).
Apenas el 37% de entrevistados se quedaría a vivir en su barrio que viene a ser la cifra más baja en comparación con el resto de distritos de la ciudad.
Dentro de los principales motivos que explican el elevado descontento por vivir en Ciutat Vella, están relacionados con los problemas de la zona.
Los principales: la falta de limpieza, la inseguridad y la dificultad para acceder a viviendas sobre todo en los barrios del Raval, Sant Pere, el Gòtic o la Barceloneta.
El sentimiento de pertenencia a la ciudad ha decaído con el pasar de los años.
Otros datos impactantes
Con respecto a la población de Barcelona el número sigue bajando en 2022. En la actualidad, la capital cuenta con 1.639.981 personas empadronadas que representan un 1,2% menos que el año pasado.
Sin embargo, se destaca que el número de residentes es el cuarto valor más alto de las últimas tres décadas, pero sobre todo por la inmigración.