Calilla. Capítulo 6: Tiempo

¡Hoy toca Calilla! Muchos de vosotros estáis ansioso de que llegue el día en el que se publica Calilla, pero las fechas que os marqué son las fechas. El capítulo de hoy es un capítulo dura. Si queréis saber que es lo que va a pasar aquí lo tenéis tranquilos.
En la nueva Era de Una ventana al Mundo, Calilla se va a mantener, podéis estar tranquilos, en breve os anunciaremos las fechas de los nuevos capítulos =)
Capítulo 6.Tiempo.Era Rafael el que había disparado. Le pegó justo en el arma, me salvó la vida pero no por mucho tiempo. Como pude, me giré para coger la navaja que siempre llevaba en los asientos traseros del carro. La cogí, pero no me dio tiempo a girarme. Ambrosio me estaba apuntando por la espalda.-¿Qué creías? De las manos de Ambrosio Pastor no se escapa nadie. Ha llegado tu hora. Cuanto me alegro, aprovechado que eres un aprovechado.-Mátame, ¿A qué estás esperando? Mátame, es lo mejor que puedes hacer. Has matado a la mujer de mi vida y ya mi vida no tiene sentido.-Le dije yo.-¡Alto ahí a la Guardia Civil!-Dijo una voz que venía de detrás de mí.-Soy el capitán de la Guardia Civil, mis hombres y yo tenemos toda la zona vigilada, aunque lo mates y te vayas no llegarás muy lejos querido Ambrosio.-Dijo el capitán.-Si alguien se mueve, juro que lo mato, en vuestras manos está que él siga vivo o no.-Dijo Ambrosio.-Sino muere antes usted. Está loco Señor Pastor, loco.-Dijo el capitán de la Guardia Civil al mismo tiempo que cogía el trabuco y le disparaba.Cuando el capitán disparó sentí que estaba a punto de rozar la muerte. Oí el disparo, note como le pegaba a la persona y pensé que me moría pero no, a mí no me había pegado. El capitán observó como un bandolero salía corriendo y le disparó. Entonces se enzarzaron en un tiroteo del que duró aproximadamente unos 15 minutos y afortunadamente no salió ningún bandolero herido. -¿Está bien señorito Raymond? Por favor le invito a que vaya a la consulta del Doctor Domínguez, allí le atenderá el mejor doctor de la comarca.-Me dijo el Capitán.-No, gracias. Estoy bien, solo ha sido el susto más que nada.-Le conteste yo.-Ha tenido suerte señorito Raymond. ¿Qué le ha dicho mientras te tenía en sus brazos?- Bueno capitán fui a denunciarlo a la Guardia Civil porque como todo el mundo sabe la Señorita María se ausenta en muchas ocasiones durante dos o tres días, pero empecé a sospechar de que no estaba en ningún congreso de viñedos cuando recibí estas cartas-Le enseñé las cartas que había recibido durante este tiempo.-¡Sorprendentes! ¿Por qué no vino a denunciarlo antes? Ahora le puedo denunciar por no colaborar con la justicia. ¿Qué pensaba arreglarlo usted solo?-¿Cómo puede ser tan cínico? Mire señor capitán todo el mundo en este pueblo sabe que usted es un corrupto y yo se lo voy a hacer saber a comandancia porque una persona como usted no debe estar al mando de un Cuartel de un pueblo tan digno como es este. Ahora si me permite me voy a mi cortijo. Quede con Dios capitán.-Vaya con cuidado señor Raymond, puede ser que le ataquen los bandoleros pero bueno como usted es tan valiente y quiere tomarse la justicia por su mano, vallase tranquilo señorito Raymond.-Si cree que los bandoleros han estado involucrados en esta trifulca se equivoca.-¿No les defenderá por qué usted es un bandolero?-Quede con Dios Capitán de la Guardia Civil, aunque le digo que le queda poco. Qué pase un buen día.Qué persona más cínica, pero le tenía que estar agradecido porque me había salvado la vida, aunque si la muerte de María era verdad hubiese preferido morirme. Continué caminando, pensativo, triste, cuando encontré una caseta en la que decidí entrar porque todas las casas podrían ser escondites para esconder a María.No me equivoqué. Allí estaba ella, llena de sangre, con magulladuras por la cara y lo más duro: sin pulso. Tenía una carta en su pecho.‘Querido Richard:Cuando leas esto probablemente ya estaré muerta, he escrito esta carta con mis últimas fuerzas y con la pluma que siempre llevo encima. Eres una persona encantadora, he pasado grandes momentos a tu lado, pero tienes que saberlo porque si no te lo digo yo no te lo podrá decir nadie, porque las dos personas que te lo podemos contar estamos muertas. Tu tío Alexander fue el amor de mi vida y el padre de mi hijo, por eso me acerqué a ti. Buscaba un padre para mi hijo. Te elegí porque recibiste la educación de tu tío. Siento haberte hecho creer falsos sentimientos. Espero que me entiendas. Tu primo se llama Pablo, es un niño maravilloso, igual que tu tío. Espero que le inculques los mismos valores que tu tío y su familia te inculcaron a ti. Por favor quiero que le digas que tú eres el padre y que yo fui la madre y que me morí. Espero que encuentres a una mujer que te quiera como te mereces. Cuida de mi hijo y del de tu tío. Toda la herencia mía es para ti y para mi hijo. Vive la vida.Os quiero mucho.María Pérez’Estaba desecho, roto de dolor, destrozado… María había muerto. La que creía que era la mujer de mi vida, ha sido toda una mentira. La mujer de la que me enamore, se acostaba con mi tío por las noches. Me había engañado. Nadie era tan bueno como lo pintaban. Mi tío era un ejemplo para muchas personas en este pueblo, pero no lo conocían de verdad. Era el peor tío del mundo, sabía que me gustaba mucho esa mujer y él se acostaba con ella por las noches y en una de esas ocasiones dejo embarazada a la que creía que era la mujer de mi vida. Y ahora solo, triste y destrozado me dejan un niño a cargo, Pablo, prometo que no le contaré nunca la verdad porque si no descubrirá que su madre es una traidora y mala madre. No quiero ninguna herencia, todas son asquerosas herencias, no quiero que ninguna persona que hable bien de ellas me dirija la palabra. Son las peores personas que he conocido en mi vida.Era tarde y el sol se ponía entre las montañas de la sierra. Muchos pensamientos relacionados con María llegaban a mi cabeza. Lo tenía claro, no podía aguantar más en estas tierras. Siempre, me habían recordado a bellos paisajes, gente extraordinaria, cultura maravillosa, pero es lo que descubres en pequeñas estancias en este pueblo. Mañana mismo me iba a Edimburgo, necesitaba que pasase tiempo y luego tal vez volvería a estas tierras. Nada más decidí irme a Edimburgo, me fui a la casa donde vivía María a recoger a Pablo y todas sus pertenecías. Sin más demora tenía que prepararlo todo para partir mañana mismo.Pasé una de las noches más inquietas y largas de mí vida, en apenas 3 años mí vida había dado un cambio radical: Mi madre había muerto, mi tío había muerto, la que creía que era la mujer de mi vida también había muerto y ahora tenía a un niño a mi cargo.Al día siguiente, después de desayunar me fui a la cueva para contarles la noticia de que me volvía a Edimburgo. Se lo tomaron bastante mal. Decían que nunca habían encontrado un bandolero tan maravilloso como era yo. Lo daba todo por la banda. Y no se equivocaron en todo lo que dijeron era verdad, en el poco tiempo que había estado en la banda me había dado cuenta de que cuando estaba con ellos era la persona más feliz del mundo. Me encantaba pero no quería estar más en este pueblo al menos por unos meses. Habían sido muchas cosas las que me habían pasado. Me volví al cortijo para coger la maleta e irme.Sin más demora, cogí a mi primo en brazos y ordene a Marta que me acercase las maletas al carro. Me iba.-Adiós Calilla.-Al mismo tiempo me caía una lágrima por la cara, en un segundo recordé la muerte de mi madre, la de mi tío y la de María.
Después de casi una semana de viaje llegué a Edimburgo. Pablo se había portado de maravilla, era un niño muy bueno y cada día me estaba encariñando más con él. Iba a hacerle caso a la carta que me dio María. A partir de este momento Pablo iba a ser mi hijo, él me llamaría papá y yo lo querré como un hijo. No sé si era la mejor elección, pero tenía claro que eso era lo que iba a hacer. Tengo que decir que estaba muy preocupado por Pablo cuando llegué a Edimburgo porque estaba todo nevado y hacía mucho frío. Feliz día

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