calles de buenos aires: olof palme

calles de buenos aires: olof palme

PALME, LA BÚSQUEDA INCANSABLE DE LA EQUIDAD CON LIBERTAD
Casi en el borde de la ciudad, en el barrio de Saavedra, junta a las vías del ferrocarril que comunican Retiro con la estación Mitre en el norte del Gran Buenos Aires corre la calle Olof Palme
¿Quién fue este personaje para que nuestra ciudad lo homenajee con un recorrido entre la Av Ricardo Balbín y Pico, mediante una ley sancionada por la Legislatura local en 1999?
Se trató de uno de los grandes políticos europeos del siglo pasado. Nacido en Estocolmo, capital de Suecia el 30 de enero de 1927, consagró su vida a la defensa y la promoción las ideas socialdemócratas.
En 1957 ingresó como legislador al Parlamento, llamado Riksdag y luego de ocupar distintos cargos gubernamentales, fue designado Ministro de Educación en 1967. En 1969 es designado líder del Partido Socialdemócrata y nuevo primer Ministro.
Durante su mandato supervisó el monopolio de radio y televisión y una serie de reformas educativas de largo alcance. Sin embargo su pasión era la política internacional; su clara postura pro-vietnamita mientras fue miembro del gobierno y más tarde como jefe de éste, causó indignación en Estados Unidos y provocó el enfriamiento de las relaciones entre los países.

Tampoco fue acogida en occidente su política de “neutralidad activa” (como el mismo solía denominarla), por ejemplo su apoyo a movimientos de liberación en el Tercer mundo, considerada como una ruptura con la tradicional política de neutralidad sueca. Aunque procuró no provocar innecesariamente a la URSS, Palme siempre condenó la intervención de las superpotencias en los asuntos internacionales de los pequeños estados dondequiera que ésta se produjera, y opinaba que como nación desarrollada con cierta relevancia en la escena mundial, Suecia tenía el deber de denunciar estos hechos. Protestó enérgicamente contra las incursiones de submarinos soviéticos en aguas suecas en la década de 1980. Cuando abandonó el gobierno en 1976, actuó en calidad de representante personal del secretario general de la ONU en el Golfo Pérsico a comienzos de la década de 1980, y examinó las posibilidades de una solución pacífica para la Guerra irani-iraquí. Fue miembro de la denominada Comisión Brandt para las relaciones Norte – Sur y presidió la conocida Comisión Palme sobre Asuntos de Desarme y Seguridad en 1982, cuyo informe Seguridad Común, recomendaba el establecimiento de un pasillo europeo libre de armas químicas y nucleares.

Podemos resumir sus ideas reivindicativas del Estado de Bienestar en la siguiente frase:

“Para mí es evidente que utilidades sociales básicas como la asistencia médica y la educación tienen que ponerse al servicio de los ciudadanos en igualdad de condiciones, de acuerdo a sus propias necesidades pero independientemente de sus ingresos y de donde vivan”.

El 28 de febrero de 1986, tras salir de un cine de la capital sueca como cualquier ciudadano, sin custodios, fue asesinado con un disparo por la espalda mientras era lo acompañado por su señora Lisbet, que fue herida. Mucho se habló y escribió sobre el móvil del homicidio: ¿grupos de extrema izquierda como el PPK de Kurdistán? ¿Un empresario afectado por su política? ¿Tráfico de armamentos? ¿La teoría del loco suelto? Lo cierto es que el expediente acumula nada menos que 700.000 páginas pero su lamentable muerte permanece impune.
FERNANDO LAROCCA
Marzo de 2013