Hace tiempo os conté como es tener tres hijos, pero no os había contado como fue inicialmente el cambio de no tener hijos a tener un hijo, y de tener un hijo a tener dos.
Tu vida ADH (antes de hijos), era tranquila y sosegada, aunque no lo recuerdes así, tenías tiempo libre, descansabas cuando lo necesitabas, salías si te apetecía… Pero cuando tienes un hijo piensas «Cuando sea madre/padre no cambiaré, seguiré haciendo mi vida normal». Ilus@.
¿Cambia tu vida cuando tienes un hijo?
Cuando tienes el primer hijo tu vida cambia, mucho. Yo creo que es el salto más grande de 0-1 ¿por qué? Porque ahora tienes que vivir a un ritmo diferente, dejar las obligaciones que tenías antes, cambiar las necesidades… todo. Cambio brutal. Eso sí, el cambio lo notaréis de verdad cuando el recién nacido tenga unos meses, porque los primeros meses en cuanto controléis el dormir y comer, realmente, los recién nacidos no hacen nada más (de esto te das cuenta más adelante)
Al principio, cuando tienes un hijo es todo algo complicado: el desconocimiento, la novedad, no saber que hacer, como hacerlo, ¿por qué llora? ¿por qué no se duerme? Pero os vais haciendo a la rutina, e incluso podéis hacer cosas de la vida ADH.
¿Entonces podemos mantener la vida ADH con un hijo? Es más fácil mantenerla porque sois más adultos que niños. Podéis hacer turnos, podéis dejarle al retoño a los abuelos (es solo un niño, un bebé, con tenerlo en brazos si la cosa se complica es sencillo), y así seguir haciendo vuestras cosas de ADH. Nosotros lo pudimos hacer, seguimos con muchas de nuestras cosas de ADH, pero llegó el segundo embarazo.
Incluso antes del segundo embarazo ya te das cuenta de que tu coche se queda pequeño (sillas a contramarcha enormes, carritos plegables que llenan el maletero, maletas enormes con cosas solo de bebés…) y piensas que igual es mejor que sea un monovolumen, por no hablar de tu moto: llega un día que solo ves carteles y oyes cuñas de radio que dicen: compramos tu moto, y ya empiezas a pensar «cuanto vale mi moto» , igual es el omento de cambiar de vehículo.
Como es el cambio de vida cuando tienes dos hijos
Cuando esperas el segundo hijo, pensáis que será mejor que con el primero, y además pensáis: «ya sabemos de que va esto».
Pues no.
Cuando llega el segundo olvidaros de hacer turnos. Sí, ya tenéis más maña, unos horarios y unas rutinas más infantiles, pero ahora hay tantos indios como vaqueros. Se descansa cuando uno o dos duermen, pero sino estáis en activo 24/7. Aquí por lo tanto, el cambio es importante.
Con el segundo hijo empiezas de cero otra vez, no dormir bien, introducir los primeros alimentos, dejarte la espalda cuando empieza a andar, la operación pañal… Si tus hijos se llevan poco tiempo, serán grandes compañeros de juegos, y estarás unos años muy metido en esos procesos, pero luego, «tachaan» verás la luz.
Eso sí, «mueres de amor» a todas horas, cuando ves que se han dormido juntitos, cuando se miran y se ríen… Con el paso de unos meses, cogeréis destreza en cuidar a dos niños a la vez, de manera que podrán volver los turnos.
Anécdota: cuando nace el primer hijo y llega la hora del baño, lo bañáis entre dos, uy uy uy, su cabeza, que se escurre, cuidado con el jabón, mejor esta crema que la otra… Cuando llega el segundo piensas ¿¿Cómo nos vamos a organizar para bañar a la criatura teniendo otra más mayor?? Y cuando llega el tercero…
¿Da mucho más trabajo tener un tercer hijo?
Esto os lo conté al detalle en este post sobre la llegada del tercer hijo, y también os hablé de cosas importantes que debes de saber si te conviertes en familia numerosa.
Ahora llega ese momento en el que hay más indios que vaqueros. Tú tienes dos manos, pero tienes ¡¡tres hijos!!
Resumiendo es: con dos hijos ya estás pringado ocupándote de su crianza 24/7, por lo tanto un tercer hijo se acopla a esa rutina, aprende de los ritmos de los mayores, duerme aunque haya ruido, entra y sale de casa desde el primer día, come lo mismo que los mayores (sin sal, por supuesto), y tú ya tienes un manejo de la situación, que ya te hubiera gustado con el primer hijo.
Te das cuenta cuando tienes dos y tres hijos, de que con un hijo ibas con mil cuidados, miedos, «tonterías», preocupaciones… pero al tener más hijos ves que no hay tantas cosas de las que preocuparse, y que se puede vivir haciendo mil cosas aunque tengas niños en casa. Nosotros por ejemplo, ¡seguimos viajando!, haciendo excursiones, y planes en familia.
¿Cómo os fue el cambio de vida cuando tuvisteis hijos? ¿Con que hijo notasteis más cambio?