Hola a todos, ¿como están? Una situación en estos días me han hecho reflexionar un poco sobre esto. Cuando tienes un hijo, la vida cambia, un montón la verdad, yo a veces digo(con voz de pito) -no te cambia mucho, pero no es verdad, si te cambia, y en todas las facetas de tu vida.
Nosotros antes salíamos todos los fines de semana, y me levantaba todos los domingos resacado de trasnochar, bueno aunque ahora que pienso, los primeros meses del niño, me levantaba igual, eso si no me dolía la cabeza del ron con coca cola.
Respecto a los amigos pasa algo muy curioso, y pasa ya desde que das la noticia del embarazo, hay algunos que les dices que vas a tener un hijo y ponen cara de vaca cuando ve pasar el tren, o directamente tu les dices -Oye que vamos a ser papás, y te dice, -a ver si este fin de semana le quitan la amarilla a Cristiano Ronaldo, que la verdad que el Madrid sufre mucho sin él... y claro tu te quedas con cara de bob esponja. Hay otros amigos que se ponen muy contentos y otros que ni fu ni fa.
También, y ya desde el principio te llevas muchas sorpresas, existen amigos que tu los consideras muy cercanos y de repente se alejan, y otros que tu los consideran lejanos( o no tan cercanos) y se acercan, y esto segundo es una gran felicidad, porque de repente personas que no esperas pasan a ser muy amigos de repente. Después están algunos amigos que los ves, y aunque no tengas mucha relación diaria, te pasa que los ves y es como si los hubieras visto el día anterior e igual hace varios meses, pero de esos hay pocos.
Ni siquiera echo nada en cara a los primeros, supongo que o no están preparados para esto de estar con padres, o que supongo que a veces los padres nos ponemos muy pesaditos, que tenemos un monotema, que siempre hablando del niño, de las cosas que hace, de lo que crece, yo que se... y cuando nos reunimos más padres juntos eso ya es el no va más, vamos que si entre el grupito de amigos que estamos, hay alguno sin hijos, se ve más perdido que Belén Esteban en una biblioteca, más perdido que un pulpo en un garaje, más perdido que Montoro en una manifestación. Igual que yo cuando se ponen a hablar de los últimos estrenos en el cine, o las últimas series que hay, me preguntan -¿Viste la última de los hermanos Cohen? y yo les respondo - Sale Peppa Pig, -no? -pues entonces no...
La verdad que los padres nos ponemos muy pesaditos cuando estamos juntos, y cuando estamos separados también. Será por eso lo de los amigos...o tal vez será que no eran tan amigos...
Supongo que antes cuando era no-padre, yo era igual, no me acuerdo pero a lo mejor los miraba raro, no entendía esa extraña felicidad detrás de unas profundas, pero tiernas ojeras, ya la entiendo.
La verdad que en la vida de unos nuevos padres reina un nuevo orden, o nuevo desorden, pero descubres que detrás de ese desorden se esconde la felicidad.