
Las estimaciones del ministro son muy diferentes a las de la herramienta informática, denominada Energeia, tal y como destacó hace una semana la portavoz de Energía del PSOE en el Congreso, Pilar Lucio, en la Comisión de Energía. “La subida del precio –le dijo Lucio al ministro–, que no del coste de producción, porque usted a veces mezcla los conceptos, sería de entre un 1% y un 1,7%, si las empresas se comportan de forma estratégica, y del 5% si se comportan de forma competitiva”. La diputada socialista preguntó a Nadal “qué modelos de mercado ha usado para decir que luz subirá un 25% “si se cierra el carbón”. Nadal replicó que se basa en datos de Euphemia, el algoritmo que se utiliza desde hace tres años para casar los mercados europeos de electricidad. Y aseguró que el software mencionado por Lucio es “más simple” que Euphemia.
Antonio M. Vélez escribe en Eldiario.es: “Las previsiones de Energeia fueron difundidas la semana pasada por Natalia Fabra, la profesora de la Universidad Carlos III, en su cuenta de Twitter. Fabra es una referencia académica en la investigación del sector eléctrico y uno de los proyectos que lidera (sobre la descarbonización del sector eléctrico) acaba de ser seleccionado por el Consejo Europeo de Investigación de la Comisión Europea para un programa de ayudas que dotará con 630 millones de euros a 329 investigadores europeos (entre ellos, doce españoles). Fabra explica que el escenario que maneja en sus previsiones es el del cierre de todo el parque de carbón del sistema ibérico de electricidad (el mercado Mibel de España y Portugal), unos 11.200 megavatios (MW), el mantenimiento nuclear y el resto de tecnologías. ‘Según mis cálculos –dice Fabra– la subida sería del 5%, pero eso sería en el mercado mayorista’. Para el consumidor final el aumento se quedaría en el 2,2%, según Fabra, dado que la parte de energía supone en torno a un 40% de la factura final. ‘Cuando el ministro habla de un 15%, si se refiere al consumidor final, la energía tendría que encarecerse un 30% en el pool”, subraya Fabra, que considera que este pronóstico está fuera de la realidad. Fabra tampoco da credibilidad a la previsión de Nadal de un encarecimiento de la luz del 40% si se cierran todas las nucleares y el carbón.