cambió, una cena en Maxim's
tres atardeceres en Mikonos
un gol de Koeman en Wembley
varios agostos en familia
la complicidad de su cama los domingos
la gentileza de la poesía
y aquellos aterradores sofocos adolescentes
por una voz que le sosegó
y un silencio que lo dijo todo
Google