Punto de inicio.TarragonaTren (RENFE). Media distancia. Catalunya
36,74 km.9 horas y 40 minutos.
Si estáis interesados en realizar esta ruta del Camino de Santiago en Cataluña, es importante que tengáis en cuenta que la distancia de Tarragona a Santes Creus es de casi 37 km. En varios documentos y guías que consultamos siempre se indicaban de 32 a 33 km como máximo, pero en ningún caso 37. Para recorrer esta distancia tardamos unas 9 horas aproximadamente.
Empezamos la ruta en los jardines de Camp de Mart de Tarragona. Cruzamos por debajo de la autovía A-7 hasta llegar a la altura del cementerio donde encontramos las primeras indicaciones de la ruta. Seguimos el GR-172 en dirección al santuario del Llorito y pasamos sobre la autopista AP-7. Cuando dejamos atrás Tarragona, el itinerario transcurre inicialmente entre urbanizaciones. El sendero transcurre entre muros de piedra seca, olivos y viñedos.
Tarragona
Cuando nos acercamos a El Catllar lo primero que divisamos es el castillo de El Catllar, enclavado sobre un gran roca y declarado Bien Cultural de Interés Nacional.
Vista del castillo de El Catllar
Al salir del pueblo pasamos cerca de l'Agulla, una curiosa construcción de piedra, estrecha y alargada, relacionada con el antiguo suministro de agua a la población. Esta construcción se ha convertido en uno de los símbolos de El Catllar.L'Agulla. El Catllar
Seguimos por la orilla izquierda del río Gaià, uno de los principales cursos fluviales de las comarcas tarraconenses. Pasamos junto a una antigua fábrica, cruzamos una vía de tren abandonada y, posteriormente, la vía del AVE por debajo de un túnel. Tomamos el primer camino a la izquierda y lo seguimos entre márgenes de piedra seca. El recorrido pasa muy cerca del pantano del río Gaià, aunque nunca llegamos a verlo.Fábrica abandonada. El Catllar
Vía de tren en desuso. El Catllar
Llegamos a Renau, una pequeña aldea que tiene su origen en el siglo XII, en un antiguo castillo que se demolió en 1876. El siguiente tramo de esta ruta es el que une Renau con Vilabella. Entre estas dos localidades entramos en la comarca del Alt Camp, donde predomina el cultivo de la vid.Entrada a Renau
Salimos de Renau siguiendo la carretera de Vilabella. Al poco rato enlazamos con el el antiguo camino de Vilabella que transcurre entre viñedos y olivares que no abandonaremos hasta llegar a esta localidad. Vilabella es un pueblo recogido y bien compactado dentro de las antiguas murallas.Al fondo, Vilabella
La pista, en buen estado, nos conducirá sin pérdida hasta Bràfim entre olivares y viñedos. Entramos a Bràfim por la larga avenida Catalunya, el antiguo camino que cruzaba el pueblo. En las afueras del pueblo, se halla el santuario de la Mare de Déu de Loreto, situado en la colina de Puigrodó y que podemos ver mientras avanzamos hacia Vila-rodona.
Al fondo, Bràfim
Estamos recorriendo el valle del Gaià. Cruzamos la carretera C-51 para encontrar un pequeño sendero escondido. Lo tomaremos siguiendo la dirección en la que veníamos. Esto nos llevará a cruzar la autopista AP-2 por un túnel.Cuando el peregrino llega al pueblo de Vila-rodona se encuentra unas peculiares esculturas de piedra. Antes de entrar en este pueblo podemos ver a lo lejos un columbario romano, recientemente restaurado. Era un edificio funerario donde se depositaban las cenizas de los difuntos, repartidas en varios nichos interiores.
Al fondo, Vila-rodona
Cruzamos Vila-rodona y la senda nos conducirá hasta el río Gaià. Entramos en un un tramo de vegetación muy densa y húmeda. Además, tendremos que cruzar el río Gaià, en más de una ocasión, por unas pasarelas de madera.Pasarela sobre el río Gaià
Nuestro objetivo cada vez está más cerca. Llegamos a Aiguamúrcia, una agrupación de casas situadas a ambos lados de la antigua carretera a Santes Creus. Es el núcleo más importante de un municipio que agrupa otras localidades: L’Albà, Les Pobles, El Pla de Manlleu, Les Ordres y Santes Creus.
Señalización del Camino en Aiguamúrcia
Finalmente, tras casi 10 horas de ruta y anocheciendo llegamos a Santes Creus; una pequeña localidad que alberga uno de los más grandes y mejor conservados conjuntos monásticos cistercences que podemos visitar en la actualidad.Pasamos la noche en el albergue Pere el Gran.
Terminamos este post con el álbum de fotos de esta larga, larga ruta por tierras tarraconenses.