Pero esta vez cambia completamente la orientación de la campaña (que no el producto, que básicamente es el mismo), y rinde un pequeño homenaje a nuestros mayores. A nuestros abuelos que día a día nos demuestran que tienen más vitalidad y ganas de vivir que muchos de los jóvenes que forman las colas del paro de las oficinas del INEM.
Porque se puede llegar a viejo, pero sin duda lo importante es la actitud ante la vida. Un spot lleno de vitalidad y de buen rollo para que, cambiando nuestros hábitos diarios (incluídos los alimentarios), podamos llegar a los 90 disfrutando de la vida intensamente (desde aquí mi pequeño homenaje a mis abuelos, claro ejemplo
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