Y en pocos, poquísimos, lugares conviven turistas y población autóctona como lo hacen aquí.
Y es que Can Paixano ha sabido mantener su esencia de tasca de barrio marinero sin sucumbir a modas.
Su producto estrella son sus vinos espumosos y cavas, que se acompañan de tapas y bocadillos calientes y fríos, y que se siguen sirviendo en la típica copa de cava baja, hoy ya sustituida por la estrecha y larga.
Siguen marchando los pedidos a voces y los camareros usan su prodigiosa memoria para recordar la cuenta de todos los clientes y calcularla sumando de cabeza.
En el recuerdo de varias generaciones están esos frankfurts, para mi los mejores de la ciudad, que acompañaban a cualquier sesión de compras cuando el puerto era un bazar, y entonces, como hoy, sólo se podía acompañar de sus vinos y cavas o de agua, nada de coca cola o cerveza.
Y aún hoy, que el puerto ha dejado de tener el esplendor de entonces, sigue siendo una excusa genial para acercarse a esta zona, disfrutar de un frankfurt con sus salsas también de elaboración propia, acompañado de una copa de rosado... mmmmm! Y lo mejor, el precio!
En el mismo local disponen de tienda donde adquirir los vinos espumosos y cavas.
Imágenes de la Fan Page de Can Paixano.
Información de interés: Can Paixano se encuentra en la calle Reina Cristina, 7 de Barcelona (en la zona del puerto)Su horario es de 09:00 a 22:30hCierra domingos y festivos.