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Canal interoceánico de Nicaragua

Publicado el 14 julio 2014 por Polikracia @polikracia

Tras la toma del poder del Sandinismo, Nicaragua se ha convertido en un país políticamente intrigante, ya que aunque su gobierno parece facilitar la dictadura a este grupo y además está sumido en escandalosos casos de inigualdad social y corrupción, parece que decide ignorar esos problemas y el famoso canal interoceánico que se había planeado construir hace casi más de 150 años, parece ser una realidad a corto plazo.

Durante los años 1850, Centroamérica se convertía en una ruta vital para varias potencias, entre ellas Gran Bretaña y los Estados Unidos. Aunque Panamá era la primera opción para la ruta de comercio entre el Pacífico y el Atlántico, Nicaragua atrajo la atención de varios inversores por buenas condiciones locales, además de ser un recorrido más corto. Uno de esos inversores, Cornelius Vanderbilt, consigue los derechos para comenzar a comerciar a través de Nicaragua, usando el Lago de Nicaragua y el Río San Juan como su ruta. Muy pronto se dieron cuenta del potencial que había en la ruta y la idea de transformarlo en un canal se hacía cada vez más grande. Los primeros intentos de Vanderbilt fracasaron, ya que Gran Bretaña estaba muy en contra de tal construcción y su territorio en  Nicaragua, El Reino de Mosquitia, colindaba con San Juan del Norte y donde se haría el canal.

El proyecto parecía esfumarse hasta que William Walker llega a Nicaragua. Con su toma de poder en el año 1855 influenciada por el Destino Manifiesto de E.E.U.U., además del hecho de que su gobierno militarista aniquilaba cualquier oposición local, el proyecto del canal volvió a entrar en discusión. Sin embargo, el Gobierno de William Walker se enfrentaba a un nuevo problema: la declaración de Guerra de Costa Rica el 1 de Marzo de 1856. Con el apoyo de Gran Bretaña, el vecino del sur se alzó en armas contra los filibusteros con el fin de expulsarlos de la región y así consolidar su control sobre Guanacaste. El 5 de Mayo de 1857  Walker huye de Nicaragua, terminando con el dominio filibustero y el proyecto del canal volvió a quedar en el olvido.

Fue hasta el año 2013 en que el proyecto del Canal interoceánico de Nicaragua volvió a la luz y esta vez con más fuerza que nunca. El gobierno de Daniel Ortega del Partido Sandinista, con una mayoría absoluta de 61 votos a favor, le entrega la concesión del canal hasta por 100 años a la empresa china HK Nicaragua Canal Development. El Megaproyecto tendrá un costo aproximado de 45000 millones de dólares y su construcción tendrá una duración de 10 años. Además se ha anunciado que Rusia se unirá a financiar el proyecto, para aumentar su influencia en la región.

El Megaproyecto opacará el Canal de Panamá, ya que a parte del Canal, se planea construir dos puertos, uno en cada costa, un Aeropuerto Internacional, varias fábricas de cemento y acero y una red de carreteras. La ruta aún no ha sido definida, pero de cualquier manera será el proyecto más grande que se haya construido en Centroamérica.

Con la intervención rusa en el proyecto, ya queda claro que este es un recurso que las naciones de China y Rusia usarán para ejercer más influencia sobre la zona y me atrevo a decir que muy pronto surgirán conflictos entre los países que financian el proyecto y los Estados Unidos. Por sus dimensiones, el Gran Canal interoceánico de Nicaragua será capaz de permitir el paso a embarcaciones mucho más grandes que las que actualmente será capaz el Canal de Panamá ampliado. El que ejerza el control sobre el canal tendrá el control sobre la mayor parte del mercadeo mundial y Nicaragua estará en el centro de todo.

¿Será esta la oportunidad de Nicaragua y de Centroamérica de ganarse un puesto en el mercado mundial o será esta región el centro de un nuevo conflicto entre la potencias por ver quién ejercerá el control mundial?

 


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