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FACTORES DE RIESGO
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SÍNTOMAS Y DIAGNÓSTICO
El 75% de las pacientes con cáncer de mama no presenta factores de riesgo, lo que refleja que todavía muchos de ellos son desconocidos. Por esta razón, los médicos aconsejan que todas las mujeres se sometan a una exploración mamaria anual por un especialista y que se realicen una autoexploración de la mama todos los meses. Si la mujer nota un bulto en la mama debe comunicárselo a su médico de inmediato.No obstante, un bulto en la mama no es sinónimo de cáncer. Todas las mamas presentan irregularidades que son más pronunciadas poco después de la menstruación. Además, varias enfermedades de la mama producen irregularidades que pueden confundirse con el cáncer. Estos bultos no cancerosos pueden ser quistes (sacos llenos de líquido) y fibroadenomas (engrosamientos del tejido mamario que produce la leche).Mujer realizándose una mamografíaLos médicos utilizan las imágenes de la mama obtenidas con rayos X, llamadas mamografías, para detectar tumores y otras irregularidades en la mama antes de que lleguen a formar un bulto. Las mamografías permiten detectar tumores en los estados tempranos, antes de que se diseminen por otras partes del cuerpo. La Sociedad Americana del Cáncer recomienda que las mujeres mayores de 40 años se hagan una mamografía anual.
La exploración de la mama con rayos X, una técnica denominada mamografía, puede aumentar la probabilidad de conseguir un tratamiento con éxito al detectar tumores en una fase temprana, antes de que se puedan palpar. Aunque los distintos estudios aportan información contradictoria sobre la efectividad de la mamografía para reducir la mortalidad por cáncer de mama, la Sociedad Americana del Cáncer recomienda que las mujeres mayores de 40 años se hagan una mamografía anual. La mamografía no permite distinguir entre un tumor benigno y un tumor maligno. La única manera de confirmar el diagnóstico de un bulto sospechoso en la mama es la biopsia, una intervención quirúrgica menor en la que se extirpa parte o todo el bulto y se analiza al microscopio en busca de células cancerosas.Si se detecta un cáncer de mama, los médicos tratan de determinar si las células malignas han metastatizado fuera de la mama y de sus tejidos vecinos, lo que puede originar complicaciones graves y en ocasiones mortales. La localización más frecuente de las metástasis del cáncer de mama son los ganglios linfáticos axilares. La presencia o ausencia de células cancerosas en los ganglios linfáticos ayuda a conocer el grado de diseminación del cáncer. Los médicos suelen extirpar varios ganglios linfáticos axilares para determinar si son cancerosos. Esta intervención quirúrgica puede producir linfedema, una hinchazón dolorosa de todo el miembro superior por acumulación de líquido, y aumentar el riesgo de infección. Gracias a una técnica novedosa denominada biopsia del ganglio centinela, se ha logrado un método menos agresivo para identificar y extirpar un ganglio centinela, un único ganglio linfático al que llegan en primer lugar las células cancerosas. Si el ganglio centinela no contiene células cancerosas, el cáncer no se ha extendido fuera de la mama y puede emplearse una cirugía más conservadora.
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TRATAMIENTO
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PRONÓSTICO