El cáncer de próstata se produce cuando se forman células malignas en una parte del aparato reproductor masculino, específicamente en la glándula de la próstata.
Dicha glándula posee la función principal de producir un fluido que forma parte de uno de los componentes del semen, se encuentra justo bajo la vejiga.
Al pasar los años, esta glándula puede acabar bloqueando ciertos conductos del cuerpo de los hombres, concretamente la vejiga y la uretra, lo que hace que se puedan dar problemas a la hora de orinar o mantener relaciones sexuales.
El cáncer de próstata es el segundo tipo de cáncer que más afecta a los hombres, justo por detrás del cáncer de pulmón, al igual que ocurre en el caso de las mujeres con el cáncer de mama.
De hecho se calcula que entre un 25% y un 30% de los hombres lo padece, aunque, afortunadamente, la fuerte perseverancia en la prevención y el tratamiento prematuro, hace que, en comparación, muy pocos casos sean mortales hoy en día.
Del mismo modo que se recomienda a las mujeres que se hagan exploraciones de las mamas por si detectan alguna anomalía, en el caso de los hombres, existen ciertos síntomas que pueden ser indicio de este tipo de enfermedad.
Dichos síntomas son los siguientes:
- Dolores a la hora de la eyaculación.
- Dificultad para orinar
- Presencia de sangre en la orina
- Presencia de sangre en el semen
- Disminución de la cantidad de orina
- Escozor o dolor al orinar
Recuerde que es muy importante conocerlos para acudir al médico. Si los detectamos a tiempo, podremos prevenir un problema mayor en el futuro. No se trata de exagerar, sino de ser conscientes de que puede existir el problema y merece la pena tratarlo a tiempo para mantener nuestro buen estado de salud.
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