
Cada 17 de noviembre se conmemora el Día Internacional del Cáncer de Pulmón y las asociaciones de pacientes recuerdan la importancia de reconocer a tiempo las señales de alerta. Detectar los síntomas de forma temprana puede facilitar un diagnóstico precoz y mejorar las opciones de tratamiento, tanto en personas fumadoras como en no fumadoras.
“Detecta las señales”: una campaña para reconocer los primeros síntomas
La Asociación Española de Afectados de Cáncer de Pulmón (AEACaP) impulsa la campaña “Detecta las señales”, con el objetivo de combatir el desconocimiento sobre esta enfermedad y animar a la población a prestar atención a los cambios persistentes en su salud respiratoria.
Según datos de la asociación, tres de cada cuatro personas diagnosticadas de cáncer de pulmón reconocen que no sabían identificar las primeras señales de alarma antes de acudir al médico. La organización insiste en que una buena información puede marcar la diferencia entre un diagnóstico tardío y uno a tiempo.
Los síntomas más habituales en las primeras etapas
De acuerdo con los informes de AEACaP y otras entidades especializadas, los síntomas que con más frecuencia refieren los pacientes antes del diagnóstico de cáncer de pulmón son:
- Tos persistente que no mejora con el paso de las semanas.
- Cansancio o debilidad sin causa clara.
- Dolor torácico, a veces asociado a la respiración o la tos.
- Dificultad para respirar o sensación de falta de aire.
- Pérdida de peso inexplicada.
Las entidades médicas recuerdan que estos síntomas también pueden estar relacionados con otras enfermedades respiratorias o problemas de salud menos graves. Sin embargo, cuando se repiten o se mantienen en el tiempo, conviene consultarlos con un profesional para descartar problemas mayores.
No se trata de alarmar, sino de acudir a revisión a tiempo
Bernard Gaspar, presidente de AEACaP, subraya que el objetivo de la campaña no es generar pánico ni saturar los servicios de urgencias por un simple episodio de tos, sino lograr una sociedad más informada. Su mensaje es claro: si estos síntomas aparecen de forma recurrente o persistente, es recomendable pedir una cita médica y hacerse una revisión.
Especialistas en salud respiratoria coinciden en que el cáncer de pulmón puede avanzar sin dar señales claras en fases iniciales. Por eso, atender cuanto antes los cambios en la respiración, la tos o el peso corporal puede facilitar que el equipo médico valore pruebas complementarias si lo considera necesario.
Historias de pacientes que no imaginaron un cáncer de pulmón
Pacientes como Stephanie Oyonarte cuentan que, al inicio, solo notaron molestias aparentemente aisladas: cambios en los dedos, dolores articulares o dolor de espalda persistente, además de algunos de los síntomas más típicos de esta enfermedad. “Sabía que algo no estaba bien, pero nunca pensé que podía ser cáncer de pulmón”, relató en un testimonio recogido por la asociación.
Otro caso, el de María Ángeles Marín, muestra lo fácil que es atribuir la tos o el dolor a otros problemas previos. Ella convivía con asma, una hernia discal y una dieta estricta, por lo que la tos persistente, el dolor de espalda y la pérdida de peso parecían tener explicación. Solo tras las revisiones médicas se llegó al diagnóstico real.
Tener tos, cansancio o dolor torácico no significa necesariamente tener cáncer de pulmón. Pero si estos síntomas son recurrentes o se prolongan en el tiempo, es importante consultar con un profesional de salud y evitar la automedicación o el autodiagnóstico.