Revista Cultura y Ocio
Mientras esperamos con ansia la canción con la que nos machacarán este verano en el chiringuito playero, piscinero o verbena de pueblo (las discotecas y pubs quedan fuera de mi alcance y sospecho que del de muchos de vosotros también jejeje, mal de muchos consuelo de tontos), seguiremos con el archiconocido "baile del caballo". Mi hijo ya casi lo domina a la perfección, y parece que el calorcito que tímidamente se asoma, lo ha despertado del letargo y vuelve a la carga.