A los 5 años ingresó en la cantera del Royal Excelsior Mouscron, club que se disolvió por problemas económicos en 2010 y que ahora se ha refundado en el Mouscron-Peruwelz, equipo que milita en la 2ª división belga. En esa etapa Maxime estuvo a las órdenes de Miroslav Djukic y ahora entrenador del Valencia, ha hablado maravillas de él. Con solo 16 años debutó en el Mouscron y tras la disolución, el Club Brujas estuvo atento para incorporarlo a sus filas.
La temporada pasada le pudimos ver muchos partidos como titular, demostrando sus habilidades por banda, manejando con maestría su magnífica zurda. Pero no ha sido hasta esta campaña, a las órdenes de Garrido, cuando Lestienne ha dado el salto al nivel de super-estrella de la Jupiler Pro League. Sus números hablan por sí solos: 48 partidos disputados en el total de la temporada, 18 goles y 13 asistencias. Ser el mejor jugador del Club Brujas durante el Play Off por el título, 5 goles y 5 asistencias, le ha valido el reconocimiento de Marc Wilmots, seleccionador nacional, que lo ha convocado con la absoluta, algo que se pedía a voces entre los aficionados del Club Brujas pero que se ha tardado en producir debido a la alta competencia que existe para los extremos de la selección.
Desde entonces Maxime Lestienne no ha parado de crecer hasta convertirse en indiscutible en las alineaciones de Juan Carlos Garrido. Nos encontramos ante un jugador de una calidad enorme. Un jugador que siempre juega un paso por delante de sus compañeros. Presume de tener una de las mejores zurdas de Bélgica y el balón parado en el Club Brujas es cosa suya. Sus estadísticas demuestran además que no solo es un goleador sino también un creador, capaz de asistir entre líneas a sus compañeros con grandes pases. Todas estas características y una cabeza tan bien amueblada para su edad le han convertido en una de los jóvenes más cotizados del fútbol belga. Su futuro a corto plazo parece que le sitúa en Brujas, disputando la próxima Europa League con el club de su corazón.