Revista Opinión

Capitulo II: Un viaje difícil

Publicado el 12 enero 2020 por Carlosgu82

Después de desayunar, nos preparamos para salir. Recuerdo que caminamos durante horas, subiendo la Colina Aullido, que se encuentra, al este de la Montaña Atlas. Era conocida, por los monos silbadorés, que habitaban ahí y que se escuchaban principalmente de noche. Los árboles eran altos y tapaban las nubes, veíamos ardillas voladoras y pájaros carpinteros

Según el diario, el templo, se encontraba, en la cima y la entrada se vería, en el atardecer, justo antes de que llegue la oscuridad (la noche).

Mientras subíamos, llegamos a un claro, en el que se encontraba tras pilares de piedra blanca, con marcas negras. Al acercarnos nos dimos cuenta que eran un tipo de escritura desconocida.Decidimos descansar en ese lugar, mientras comíamos, investigaba, sobre aquella escritura, en los datos de mi madre, sobre lenguas antiguas.

– ¿Haz podido descubrir algo?- Pregunto Luisana, mientras mordía un sadwich.

-No mucho, los pilares son de protección, al parecer, hace siglos, estos tipos de pilares, se construyeron cerca de cada templo. Con el objetivo de proteger a los mismo, pero todavía no sé cómo- Le respondí, mientras revisaba, algunas páginas y tomaba un vaso con jugo.

-Pero eso es bueno ¿No?- Dijo Track- Significa que estamos cerca de la entrada y lo que sea que hagan estas cosas, nos protegerán-

-Es cierto, y todavía queda mucho hasta el atardecer- Dijo Luisana con emoción.

-Tienen razón pero… Estas runas o escritura que tienen talladas… Quisiera saber que dicen- Decía, mientras leía una hoja, en la que hablaba de un Lenguaje de magia. Un tipo de runas pintadas, con la que se podía dejar un hechizo de zona, con la suficiente magia, para ser utilizado en un momento en el futuro.

En el diario, tambien decía, que las aldeas elementales, tenía su propia runas, llamadas Rutas. Yo solo conocía las runas llamadas Gretas, usadas por todas las aldeas o familias mágicas, para realizar principalmente, hechizos de área.

-Seguiré leyendo un poco más. Quisiera descubrir que dice- Dije

-Ok, Track y yo, iremos a entrenar un poco- Sacaba su caja de tinta.

-Si, pero hay que estás pendiente dura mucho tiempo aquí y luego no poder llegar a la entrada- Dijo mirando el cielo.

-Estaré pendiente y le avisaré, cuando tengamos que irnos-

-Perfecto, ¡Vamos!- Dijo Luisana. Ella pertenece a una de la familia mágica más antigua, Los , creadores de la magia de control de tinta, hace muchos siglo, y más adelante, se volvieron, los encargados de hacer los tatuajes, a cada descendiente, de las demás familias. Ella hizo el de Track y el mío, cuando cumplimos los quince años.

-Ok- Dijo Track, tomando su espada. El usaba una magia de almacenamiento y control de armas. Con ella lograba guarda, cualquier tipo de espada o arma, en una especie de bolso mágico espacial. Además, de que podía usar hechizos distintos, con cada arma que invocaba. Lamentablemente, era el último descendiente de su familia, debido a que sus padres murieron en la guerra civil de hace 20 años, cuando el solo tenía 10. El General Arturo Magno, eran gran amigo de la familia y cuida a Track, como si fuera su hijo.

Mientras leía el diario, llegue a una parte, en la que mi madre, hablo de un tipo de traducción, de Rutas a Gretas. También había una lista, con las runas que ella había encontrado y traducido, en sus viajes.

Recuerdo, que decía «Malum Vitae», en aquellas runas de los pilares. Según la lista, «Vitae» se dice «Seikatsu», que significa vida o despertar. Y la palabra «Malum» en Greta, se pronuncia «Warui», pero desconocía su significado. Al decirlo junto, se pronunciaba…

-«Warui Seikatsu»- De pronto una explosión de magia, surgió del pilar del centro y empezó a temblar.

Las tres estructuras de piedras, brillaban con una luz blanca.

-¿Qué está pasando?- Pregunto Track, con una lanza en la mano.

-No lo sé, traduje lo que decía y empezó emana esta magia maligna- Dije, percibiendo un aura de magia negra.

-Los pilares se están cayendo- Grito Luisana.

Las rocas cayeron con fuerza, la tierra no dejaba de temblar y aquella aura se expandía más.

-¿Qué hacemos Eliot?- Pregunto Luisana

-No se, creo que active algún hechizo de trampa y las protecciones, lo detectaron, como un ataque al templo- Pensé con rapidez.

Se empezaron a unir las rocas, brillando con más intensidad. Tomaron la forma de un cuerpo y antes de darnos cuenta, teníamos un Golem de piedra, en frente de nosotros y había cesado el temblor.

Escuchamos la voz una mujer, decir a lo lejos, «Guardián del templo, protege». Con una voz profunda, el Golem hablo.

-Onda de luz- Choco las dos rocas, que completaban sus brazos y una luz destello de ellas.

La magia maligna, había desaparecido y el Golem dejo de moverse por un momento. Pero de las sombras de los árboles, salió una especie de espectro negro, que golpeó al Golem, derrimbandoló y luego se desvaneció. Aquel Guardián se levantó, pero la luz blanca, que emanaba, se apagaba.

De las uniones de las piedras, empezó a salir una sombra, que las cubrió. De las grietas, salía una luz roja.

-Destruir- Dijo el Golem, mirando hacia nosotros- Impacto Corrosivo- De sus brazos, formó una esfera negra, que lanzó contra nosotros.

-¡Cuidado!- Grito Track

Esquivamos el ataque y la esfera impacto contra los árboles, pudriendo a cada uno de los que toco.

-¿Por qué nos atacó? Pensé que era bueno- Dijo Luisana.

-Parece que fue poseído, por esa magia oscura- Dijo Track, cambiando su lanza por martillo- Tenemos que derrotarlo de una vez, o tendremos tiempo de llegar al templo. «Trueno de Thor»- Un gran rayo cayó sobre el Golem.

Él ahora mounstro, ante nuestro ojos, de retorció con la electricidad, pero despues de un momento, parecía que la absorbía.

-«Rayo»- El Golem, género una esfera de luz en su pecho y disparó una rayo de energía.

-Cuidado. «Levitar»- Hice que nos elevarnos por encima del ataque, del Golem.

El rayo arraso, con todo lo que estaba, detrás de nosotros, árboles, animales, piedras, todo lo hizo ceniza.

– Ataquen ustedes, no podré mantenerlos, en el aire mucho tiempo- Le dije a Luisana

-«Cadenas de Tinta»- Lanzó tinta al aire, que fue directo al Golem, tomando forma de cadenas y apresandoló, contra el piso.

-Eso es, «Impacto Destructor»- Track lanzó el martillo contra el mounstro, arrastrandonlo hacia, a través del bosque.

-Antes de caer, nos llevaré hasta allá- Mientras bajamos, fui llevándonos hasta donde quedó el golem.

Aterrizamos, enfrente del impacto, Track atrajo el martillo, las rocas, del cuerpo, estaba expacida por la zona, alguna estaban partidas en pedazos. Pero todavía se sentía magia en ellas.

-¿Ganamos?- Pregunto Track.

-Algo me dice, que todavía no- Le respondí

-¿A qué te refieres?-

-Miren- Dijo Luisana. El Golem, se estaba rearmando, roca por roca, se unian- Tenemos que huir y llegar a la cima.

-Tienen razón- Dijo Track- Si llegamos al templo, tal vez se detenga el hechizo de guardián-

-Esperen y vean, todas las piedras son atraídas, por una central- Dije, mientras veía, que las rocas iban en una misma dirección, uniéndose a una sola, que tenía la Rutas talladas.

-Es cierto- Dijo Luisana- Es como el corazón del Golem-

-La destruiré. «Golpe de Sentencia»- Alzó el martillo, pero cuando fue a destruirla, se alzó el corazón.

-Orbita- Escuchamos la voz del mounstro y las rocas empezaron a gira, entorno al núcleo.

-¡Subamos!- Grito Luisana.

Empezamos a corre, a través de los árboles, en dirección a la cima, el plan de entrar en el templo, podría funcionar. Pero primero, tendríamos que encontrar la entrada, justo en el atardecer, mientras esta cosa nos seguía. Además de que esa magia negra, podía llegar a mantenerlos con vida, incluso, si el hechizo del Guardián, se desactivará.

– «Meteoro»- Conjuro el Golem y las grandes rocas, caían repetidamente contra el suelo.

-Si seguimos así moriremos- Dijo Track.

-«Levitar»- Nos eleve otra vez.Las rocas pasaban cerca de nosotros, apenas podíamos esquivarla- «Gravedad Intensiva»- Aumente la gravedad cerca del Golem, atrayendolo a piso. Pero era fuerte y se resistía a caer, solo logré que no se moviera- No durará mucho, se resiste.

-Avancemos todo lo que podamos- Dijo Luisana. Usando el Levitar, recorrimos, una gran distancia. Luego bajamos y seguimos a pie.

Recuerdo, que corrimos, como nunca antes, lo habíamos hecho. Cuando al fin llegamos a la cima, nos sentimos, como si hubiéramos, conseguido un logro importante. Nos miramos y sonreímos, era uno de los momentos que atesoraría, hasta mi muerte.

-Bien, llegamos, ahora tenemos que pensar, en como entrar al templo o destruir el corazón del Golem- Dijo Track.

-¿Qué dice el diario sobre la entrada?- Me pregunto Luisana.

-Que la luz del atardecer, no guiará a ella. Pero no especifica cómo- Le respondí- Y ¿Qué sabemos del Golem, que podamos usar en su contra?-

-Que el corazón, es su punto debil- Dijo Luisana.

-Cuando estábamos en el aire y el nos atacaba, vi que, entre más roca usaba contra nosotros, iba descuidando, la protección del corazón- Dijo Track, con una expresión pensativa.

-Podemos idea un plan, en base a eso- Dijo Luisana.

-Exacto, pensemos…- Dije

El sol empezó a caer, no había pista o señal, de la entrada. Pero un estruendo, a lo lejos, nos avisó que, el ser de roca, se acercaba con rapidez. Nos miramos a la cara, recordando el plan.

-¿Listos?- Les pregunté.

-Siempre amigo- Dijo Track.

-Por supuesto- Dijo Luisana.

-Espero que funcione y lo logremos a tiempo-

Nos dispersamos, todos en busca de Golem, era hora de contraatacar. Sin darme cuenta, lo tenía justo encima de mi, me moví con sigilo, esperando el momento indicado.

– Metereoro- Atacó… Pero eso era lo que quería.

-«Gravedad Intensiva»- La rocas cayeron sobre mi, aplastando… Una forma de tinta.

La tinta corría, en el piso, cuando el Golem, intento atraer las rocas de vuelta, no pudo, mi hechizo las mantenía en el suelo. Con esto nos libramos de las más grandes. Empezó a liberar aquellas más cercanas, al corazón, volviéndose más rápido, pero estando cerca de mostrar el núcleo.

-Bien, fase uno completa, sigues tú Luisana- Estaba escondido entra las ramas y ella salió de un árbol cercano.

-Voy- Dijo Luisana- Elévame- Cuando subió, soltó una gran cantidad de tinta, en el aire- «Pinturas de Fénix»- Hizo gestos, como si pintara y la pintura se tiñó de roja.

De la tinta, salieron aves, que atacaron al monstruo de piedra. Hacia que las rocas se alejaran de centro y así perdieran poder, en la primera oportunidad, la destruía. Eso hizo que usará, las últimas que cubría el núcleo.

-«Cometas»- Las tres rocas quedaron orbitando el corazón, se movían a gran velocidad, atacando si parar a Luisana.

Ella se trataba de proteger con las aves, pero era imposible, que detuviera, todo los ataques.

-Track! ¡Qué esperas!- Grite.

-El momento… Justo- Dijo él- «Disparó Final»- Con un arco, que él llamaba «El arco de Cupido», disparó una gran flecha.

Viajo a gran velocidad y atravesó el centro de corazón. Una gran explosión sucedió y un grito de sufrimiento se escuchó, mientras se veía, el espectro desvanecerse en el aire. Recuerdo ver a Luisana caer y salir corriendo, para atajarla. Salte y la tome, llegó Track asustado, preguntando si estaba bien. Despertó después de unos minutos, con su bella sonrisa, en el rostro.

-¿Está bien?- Pregunté.

-Si- Dijo levantándose-¿Por qué tardaste tanto?

-Disculpa, estaba nervioso de fallar- Dijo Track, con una pequeña sonrisa

-Estan bien, lo bueno, es que ya no está ¿¡Y la entrada!? ¿La encontraron?- Pregunto con rapidez Luisana

-Todavia no, pero está atardeciendo, así que es hora o nunca- Le dije, mirando al cielo.

Los últimos rayos de luz caían, nuestra esperanzas, no eran muy altas. Hasta que un hilo de luz, proveniente de un árbol, nos recobro la fe. Sin darnos cuenta, los árboles, cercanos a nosotros, desprendieron hilos de luz, todos yendo a la misma dirección.

Empezamos a seguirlos y más hilos, surgiendo del bosque, aparecieron alrededor, avanzamos sin parar, siguiendo, algo que podía ser una trampa o nuestra única pista. Recuerdo nuestra cara de asombro, cuándo vimos, a donde llegaban, los hilos de luz. Era un Diamante azul, encima de una gran puerta de roble, con detalles de oro y un marco de mármol, con la escritura «Nunca pierda la esperanza».

-Entremos… Al templo-


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