Después de no sé cuantos meses, un confinamiento y días en los que todo se veía demasiado negro, vuelvo al blog con un post que siempre ha gustado: el de los caprichos. Y es que después de estos meses metidos en casa, un día tras otro, con malas noticias diarias y poca perspectiva de futuro a corto plazo, ahora que se va viendo la luz al final del túnel, apetece llenarse de positividad y apoyarse en esas pequeñas cosas que nos hacen felices.
No sé a vosotros si os ha pasado, pero a mí desde luego el confinamiento me ha ayudado para poner en perspectiva todo el planteamiento vital que tenía montado y dar valor a cosas que antes prácticamente pasaban desapercibidas. Disfrutar del aire libre, de una charla animada con los míos, compartir una tarde de risas con mis amigas, poder pasar rato en la piscina con los niños o dedicar unos minutillos al día a mí misma. No hace falta más, y esta situación nos lo ha demostrado. El placer de las pequeñas cosas.
Sin más rodeos os cuento cuáles son los caprichos de este mes. No suponen grandes desembolsos, porque sé que, para muchos, la economía no está para tirar cohetes, pero de vez en cuando, una alegría, debería de ser obligatoria. ¡Allá va!
1. Abiby Beauty Box
Se trata de una caja mensual con productos únicos de belleza y cosmética, difíciles de encontrar en las tiendas en España. Lo que tiene de especial esta caja es que todos sus productos son veganos y libres de crueldad animal, y cuenta con marcas top que ofrecen productos en tamaño normal o de viaje. En Abibi.es también encontraréis consejos y tutoriales para aprovechar al máximo los productos que recibiréis. Podéis elegir entre una suscripción trimestral o pagar mes a mes la caja, vosotras decidís, pero una vez empezáis a recibirla, es difícil dejarla.
2. Birkenstock Arizona
Las primeras sandalias de la marca alemana me las compré en 2015 con muchas dudas por si pasarían de moda y al final nos las combinara con nada, pero después de 5 años poniéndomelas para todo, ha llegado el momento de ir a por el segundo par. Pura comodidad y una inversión que, sin duda, merece la pena. En esta ocasión me apetece tener las de doble hebilla y en ante beige, que creo que es un color que combina con todo. Las anteriores que tengo son el modelo Madrid en negro, y si os queréis iniciar con esta marca, las recomiendo 100%.
3. Pendientes de Smiley
Los hay en muchas tiendas, pero estos de Pull&Bear además de bonitos, están genial de precio. Discretos y divertidos, geniales para darse un caprichillo. Yo en los últimos años son fan acérrima de los accesorios en dorado, así que estos son firmes candidatos para venirse conmigo a casa.
4. Tarjetero de Bimba y Lola
El que tengo ahora podría decir que tiene diez años dando servicio sin descanso, pero después de tanta actividad va pidiendo un cambio, y el color nude de este me encanta. En ciertas cosas está claro que invertir un poco más es sinónimo de durabilidad. A mí me gusta llevar por un lado las tarjetas, y por otro el efectivo. Me es más práctico. Así que, si sois de las mías, seguro que este tarjetero también os encanta. Además que cuando lleváis bolsos pequeños es la mejor solución para que os quepa todo sin necesidad de jugar al Tetris.
Espero que a partir de ahora nos veamos más por aquí y que tengáis un verano lo más tranquilo posible.
¿Qué capricho post confinamiento os habéis dado? Confesad 😆