Título: Extraordinario (Wonder)
Director: Stephen Chbosky
Año: 2017
País: Estados UnidosGénero: Drama Duración: 1 hora 53 minutos
Extraordinario cuenta la inspiradora y conmovedora historia de August Pullman. Una diferencia de nacimiento en su rostro, había impedido que August fuera a una escuela normal, pero cuando entra al quinto año se convierte en el héroe más inesperado. Mientras su familia, nuevos compañeros y la comunidad luchan por encontrar compasión y aceptación, el extraordinario viaje de Auggie los unirá para probar que cuando no puedes adaptarte es porque naciste para destacarte.
Fui a ver Wonder con altísimas expectativas, como saben, el libro en el que la película está basada es uno de mis favoritos, y la verdad es que nunca esperé que fueran a convertirlo en película, así que la mera idea de ver una historia tan hermosa en pantalla me tenía muy emocionada. Por supuesto, siempre estaba presente el miedo de que la adaptación fuera un horror y de terminar decepcionada (cosa que pasa bastante am i rite). Good news, esta vez no pasó nada de eso, y en cambio salí tan feliz que casi no podía creerlo (bueno, en realidad salí llorando, pero ese es precisamente el punto).
August es un niño común de 10 años: le gusta jugar en su Xbox, le encantan los astronautas, Star Wars, y pasar tiempo con su familia, además de eso es muy inteligente pero nunca ha ido a la escuela porque nació con una extraña condición que hace que su rostro no se vea como el de los demás. Es por eso que después de 27 cirugías, sus padres creen que está listo para enfrentar el mundo real al 100% tal y como el resto de los niños, y sí, tal y como se lo imaginan, al comienzo es un gran desastre.
La película (al igual que el libro) comienza narrandonos la historia desde el punto de vista de su protagonista, pero va cambiando a medida que avanza, mostrándonos como la viven su hermana mayor y sus amigos, y de como una misma situación afecta a todos de un modo distinto.
Creo que por este mismo motivo, no hay forma de que la película no te llegue al corazón, ya que al menos uno de los puntos de vista conectará con tu sensibilidad, y porque en su totalidad es una historia preciosa, que aunque está dirigida al público infantil (y recomiendo mucho que la vean los niños) nos hace reflexionar a todos, y mirar el mundo de una forma distinta.
La adaptación también es muy buena, y aunque me leí el libro hace un par de años y no recuerdo todos los detalles, quedé muy contenta cuando terminó la película, porque no hubieron cambios mayores y la esencia de la historia era exactamente la misma que la que se sentía en el libro. Me sorprendió ver que el director de la película es Stephen Chobsky, director de The Perks of Being a Wallflower, y también autor del mismo libro.
En fin, no puedo dejar de recomendarles esta película (y este libro, que si no lo han leído, ya es tiempo de hacerlo), y si tienen niños pequeños en su familia, llévenlos con ustedes a verla, porque es perfecta para ellos.
5 / 5