La firma que aúna funcionalidad y estética con cortes depurados y tejidos de altísima calidad, propone una temporada masculina llena de matices. Los tonos naturales dialogan con una paleta de colores base en una colección versátil y redonda, en el que los complementos se ven salpicados por gotas de color en contraste como el amarillo subido, el rojo fresa y el azul Klein que empapan las prendas de exterior como trencas con alamares de hueso natural, o jerséis finos en punto de algodón.
La camisería se renueva a su vez ofreciendo propuestas en vichy en la paleta completa de la colección y divertidos detalles de palmeras y flamencos bordados en las versiones más informales.
La sastrería, buque insignia de la casa, se renueva con un guiño al verano más natural en sus versiones de lino tostado y chocolate manteniendo las estructuras clásicas del traje masculino, y en la colección de lanas frías y algodones, las prendas de sastrería muestran al curioso que se acerca los detalles cuidados al máximo en forros con diferentes estampados.
