Los defensores del evento aseguran que su objetivo es la repoblación rural y que estas caravanas incluso cumplen un bien social. La publicidad aseguraban a cada hombre que se apuntara, una compañera. He visto publicidad de prostíbulos mucho más elegantes. Para participar, los hombres abonan 35 euros y las mujeres, 20.
Parece que algunas mujeres todavía no se han enterado de que si no pagan por el producto, es que ellas son el producto. Por ese precio, tienen derecho a la cena y el baile, que se alargará hasta altas horas de la madrugada. Los participantes, por su parte, reconocen que lo pasan bien, que no hacen daño a nadie y que es una forma de conocer gente. No entienden el revuelo, aseguran. Permítanme incluir un vídeo de un señor que quiere encontrar una esposa. Recuerden, es España en el siglo XXI.Es vergonzosa la utilización de las mujeres como si fueran ganado. Esas caravanas son un mercado de carne. Es intolerable que no haya mecanismos legales que impidan que se trate a la mujer como un mero objeto. Con la excusa de la repoblación rural se abre la puerta al turismo sexual. Y cuidado. No piensen que es algo puntual. En el fondo, es lo que la sociedad de hoy busca. De una forma más o menos burda, pero la cosificación de la mujer es un hecho evidente por donde mire. Y por supuesto, no se combate con leyes, sino con educación.
Piensen.
Sean buenos.La canción regalo de hoy viene de la mano de ultramar. De mi buena amiga @Solidaridad1000. Nos propone Solo con verte. Canción romántica para nuestros donjuanes. Con todos ustedes: ¡Banda MS!
https://www.youtube.com/watch?v=GOs96LMUCDA