En el artículo de hoy, vamos a hablar del carbón activado, un producto excepcional, con una buena cantidad de beneficios para quien lo consume. En esta guía, te explicamos cuáles son esos beneficios y cómo puedes utilizar el carbón activado.
¿Qué es el carbón activado y cómo se usa?
El carbón activado, también llamado carbón activo, es un carbón poroso que tiene la capacidad de atrapar diferentes tipos de compuestos que pueda haber en un ambiente gaseoso o líquido, especialmente los orgánicos.
Hay que señalar que se trata del purificante más utilizado por el ser humano, dada la efectividad que tiene al capturar estos compuestos.
Estos compuestos orgánicos, que son los que mejor captura el carbón activado, son compuestos que se derivan del metabolismo de los seres vivos, con una estructura consistente en átomos de carbono e hidrógeno.
Dentro de este tipo de compuestos se encuentran todos los derivados del mundo animal y vegetal. Probablemente, el compuesto derivado más conocido por todos, sea el petróleo y el gas.
Los sólidos que tienen capacidad para adherir a sus paredes estas moléculas, son llamados adsorbentes, y a la capacidad en sí, se le llama capacidad de adsorción (nótese que no es lo mismo que la absorción). La molécula encargada de esto es el adsorbato.
El carbón activado es el proceso de purificación con más usos y más aplicaciones que existe después de la filtración (la filtración consiste, básicamente, en retener los sólidos que hay en un líquido, como haces con un colador, por ejemplo).
Un apartado más abajo, te explicamos cuáles son los usos más habituales del carbón activado.
¿Cómo se activa el carbón? ¿De dónde saca su propiedad adsorbente?
Hay que mencionar que cualquier partícula de carbón tiene, de forma natural, la capacidad de adsorber. Es por ello que, tradicionalmente, una de las formas de evitar malos olores era mediante el carbón de leña.
Sin embargo, estas propiedades no están en su máxima expresión. Se puede conseguir mayor capacidad de adsorción mediante el proceso de activación, que da lugar al carbón activado propiamente dicho.
Activar un carbón consiste, esencialmente, en hacerlo poroso, de forma que se amplía su capacidad de adsorción. Por ejemplo, un gramo de carbón de leña tiene un área superficial de unos 50m2, mientras que, con la activación, aumenta hasta 600 u 800m2.
La explicación física y química de cómo el carbón es capaz de adsorber moléculas es un poco complicado, por lo que, para no hacer demasiado pesado este artículo, nos lo vamos a ahorrar. Si te interesa, es una información de fácil acceso con una simple búsqueda en Google.
El carbón activado, en teoría, se puede hacer con cualquier partícula de carbón. Esto incluiría el carbón propiamente dicho, el diamante o el grafito. Sin embargo, éstos últimos generan algunos problemas.
El problema es que los átomos del diamante y del grafito están muy ordenados, lo que dificulta el proceso de eliminación de átomos para generar poros (necesarios para la adsorción). Además, el diamante sería muy caro, por supuesto. Por ello, existe una característica de los carbones, llama coquización, que mide el ordenamiento de los átomos de carbono, de tal forma que se puede tener “calidades” de carbón para activar.
¿Cuáles son los usos habituales del carbón activado?
A continuación, te mencionamos algunos de los usos más comunes del carbón activado. Como ves, como lleva tanto tiempo utilizándose para purificar y lo hace tan bien, se han desarrollado una buena cantidad de procedimientos.
Potabilización de agua
El primero de los usos del carbón activado es el de la purificación y potabilización del agua. El carbón activado puede retener plaguicidas, grasas, aceites, detergentes, toxinas, compuestos orgánicos producidos por algas y vegetales, desechos animales… Es, en definitiva, un producto que se utiliza en una gran cantidad de industrias y situaciones para hacer que el agua no sea peligrosa para la salud de aquello que la va a consumir (no necesariamente humanos, también animales o plantas).
Deodorización y purificación del aire
Por otro lado, el carbón activado también se utiliza para deodorizar (quitar el olor) y purificar el aire. Las situaciones en las que se utiliza esta aplicación son de lo más variadas.
Por ejemplo, se suele utilizar en respiradores de cartucho, en sistemas de recirculación de aire en los diferentes espacios públicos, en casetas de aplicación de pinturas, espacios de almacenamiento de solventes orgánicos, etc.
Tratamiento de intoxicaciones agudas
Otro de los usos que se le da normalmente al carbón activado, es el de tratar las intoxicaciones agudas. De hecho, durante mucho tiempo, se consideró que el carbón activado era el antídoto más universal posible.
Es un producto que se puede encontrar en las salas de urgencias de los hospitales, por ejemplo, y ya desde la antigüedad se utilizaba para sanar a personas que habían consumido algo y no se sabía qué era.
Refino del azúcar
Durante el refino del azúcar también se emplea el carbón activado, puesto que permite retener las proteínas que dan color al jugo de la caña. El objetivo de este proceso es el de evitar que el azúcar dé inicio a su proceso de fermentación y se eche a perder.
Hay otros alimentos en los que el carbón activado se utiliza de forma similar, pero nos centramos en el del azúcar porque el más fácil de comprender para aquellas personas que no están muy familiarizadas con estos procesos de refino.
Algunos otros usos
Otro uso habitual del carbón activado es la decoloración de aceites vegetales, como el de coco, la glucosa de maíz y otros líquidos que se van a destinar a la alimentación. También se utiliza para decolorar y deodorizar algunas bebidas alcohólicas, como el vino, pero también la mayor parte de los destilados, independientemente de su origen.
Otro uso bastante frecuente es el de la recuperación de oro. Si el oro se encuentra junto a otros minerales y no se puede separar por procesos de flotación, se suele disolver en cianuro de sodio, y se adsorbe con carbón activado.
¿Cómo se presenta el carbón activado?
El carbón activado se puede producir en forma de polvo, de gránulos o de pelets cilíndricos, dependiendo del uso que se le vaya a dar. En general, el polvo se utiliza exclusivamente en la purificación de líquidos. En este caso, el carbón se dosifica en un tanque con agitación, y después se separa del líquido mediante un proceso de filtrado.
El carbón granular se produce en diferentes grosores, y se utiliza en la purificación de líquidos y gases. Cada líquido y gas necesita un grosor específico para que su purificación sea óptima, hay que señalar.
Por último, los peles se utilizan para el tratamiento de gases, puesto que su forma de cilindro permite una menor caída de presión, lo cual es bueno para purificar los gases.
¿Por qué deberías tener carbón activado en casa?
A continuación, te vamos a mencionar algunas razones por las que deberías tener carbón activado en casa. Y es que, después de lo anterior, seguro que ya te has convencido de que el carbón activado es una magnífica forma de purificar tu hogar.
Una nota importante antes de empezar
A continuación, se van a presentar diferentes razones por las que deberías tener carbón activado en casa. Algunas de ellas implican su ingesta. Aunque la ingesta de carbón activado no es peligrosa, conviene que tengas en cuenta estos dos aspectos:
- El carbón activado tiende a deshidratar. Por lo tanto, es recomendable que consumas un par de litros de agua al día para asegurarte de que no sufres ningún problema de deshidratación al consumirlo.
- El carbón activado puede anular el efecto de los medicamentos. Por ello, es recomendable que no lo tomes hasta que hayan transcurrido dos horas desde la ingesta del medicamento.
Reduce los niveles altos de colesterol
En primer lugar, hay que mencionar que el carbón activado ha sido analizado en múltiples estudios científicos y se ha demostrado que puede reducir los niveles de colesterol malo, así como aumentar el colesterol bueno. En un estudio, por ejemplo, se demostró que el colesterol total se había reducido en un 25%, mientras que el colesterol bueno había aumentado en un 8%. Y esto, utilizando el carbón activado durante solo cuatro semanas.
Anti-picaduras
Las propiedades adsorbentes del carbón activado también pueden ser útiles para eliminar el veneno de algunas picaduras. Por supuesto, si te ha picado algo especialmente peligroso, conviene que vayas al médico, pero, para picaduras de abeja o mosquitos, va muy bien.
Además, permite reducir el dolor y la inflamación producida por la picadura o la mordedura.
La mejor forma de utilizar el carbón activado en estos casos es mediante una pasta que mezcle un poco de aloe vera con el carbón activado. Si no tienes aloe vera, puedes mezclarlo con agua, pero con aloe vera funciona mejor.
El carbón activado es anti-envejecimiento
Otro de los usos del carbón activado es el de prevenir el daño celular en riñones e hígado, lo que contribuye a reducir el proceso de envejecimiento y sentirte mejor contigo mismo en lo que respecta a tu estado de salud.
El carbón activado, al consumirlo, se encargará de apoyar a los principales órganos de limpieza del organismo, contribuyendo a eliminar las toxinas y los productos químicos que pueden dañar al cuerpo humano.
La mejor forma de consumir carbón activado para esto es mediante la ingesta de medio gramo de carbón activado después de las comidas.
Blanqueador dental
Otro uso interesante para el carbón activado es el de blanquear los dientes. Además, es uno de los usos más conocidos y tradicionalmente utilizados por personas de todo el mundo.
Puede parecer un poco asqueroso, pero lo cierto es que funciona. Cepillarte los dientes echando un poco de carbón activado a tu pasta de dientes, te permitirá tener una mejor dentadura.
Eso sí, hay que mencionar que, después de utilizarlo, tienes que enjuagarte bien la boca, porque, de lo contrario, tendrás la sensación de tener arena en la boca durante todo el día.
Es importante señalar, adicionalmente, que, frente a otras técnicas de blanqueo dental, el carbón activado no daña el esmalte dental. Por lo tanto, es una forma fantástica de mantener los dientes libres de manchas de vino o café.
Desintoxicación digestiva
Como ya se mencionó antes, en el mundo médico se utiliza el carbón activado para solucionar problemas de intoxicaciones agudas. De hecho, incluso se utiliza para combatir las sobredosis provocadas por vía oral.
Es importante mencionar que, incluso aunque no hayas tenido una intoxicación aguda, conviene que, periódicamente, limpies tu organismo con carbón activado. La razón para hacerlo es que las diferentes toxinas que tienen los alimentos procesados tienden a acumularse en tu interior.
No es necesario que consumas carbón activado de forma continua a lo largo del tiempo para hacer esto. Bastará con que tomes diez gramos 90 minutos antes de cada comida durante dos días.
Si quieres mantenerte limpio por dentro, puedes hacer esto una vez cada dos semanas, y notarás cómo te sientes con más energía al haber eliminado de tu interior todo tipo de toxinas.
También es importante que, durante este proceso de limpieza interior, solo consumas frutas y verduras orgánicas, así como carnes que no hayan sido procesadas. De esta forma, multiplicarás su efecto.
Alivia los gases y la hinchazón estomacal
Si sufres de gases, hinchazón estomacal o acidez de estómago, el carbón activado también será un gran aliado para ti. Además, el carbón activado es mucho más barato, seguro y con menos efectos secundarios que las pastillas digestivas o antiácidos.
Puedes tomar 500 miligramos una hora después de haber tomado una comida especialmente copiosa, o de forma habitual si sueles tener estos problemas. Notarás la mejora en poco tiempo.
Purificar el agua y el aire del hogar
Como ya hemos mencionado a lo largo de todo el artículo, el carbón activado se utiliza para purificar los gases y los líquidos. Por lo tanto, es una forma fantástica de purificar el agua y el aire en tu hogar.
De hecho, seguramente hayas visto, en alguna ocasión, unas jarras que tienen un filtro en su interior, con pequeñas motas negras flotando. Pues bien, esas motas negras que flotan en el filtro son partículas de carbón activo.
Gracias al carbón activo, puedes capturar impurezas del aire y del agua, como pesticidas, residuos industriales y diferentes productos químicos. Eso sí, debes tener en cuenta que no atrapa bacterias, virus, ni minerales del agua.
El carbón activo también ayuda a quitar un poco de fluoruro del agua, aunque no lo eliminar completamente. Ten en cuenta que evitar el flúor es muy importante para tener una buena salud bucal.
Por su parte, los filtros de carbón activado para el aire se suelen utilizar para capturar olores, aunque también eliminan partículas que podrían llegar a ser tóxicas, como algunos solventes orgánicos (razón por la cual te iría muy bien tenerlo en tu habitación de bricolaje).
Como puedes ver, el carbón activado tiene sustanciales beneficios para la salud de quien lo consume, y usos de lo más variados. Esperamos que le saques el máximo partido y que esta guía te haya resultado útil.