![Carcajadas impúdicas Carcajadas impúdicas](http://m1.paperblog.com/i/34/347055/carcajadas-impudicas-L-bAT449.jpeg)
Todos ellos tienen motivos para llorar, más que para reir. El Rey porque no puede seguir en silencio después de haber recibido un documento, firmado por los 61 empresarios más importantes del país, que representa la descalificación más contundente a un presidente de gobierno español en toda la historia moderna. Hace mucho tiempo que el monarca debió captar el clamor de los españoles contra Zapatero y reaccionar en consecuencia, pero no lo ha hecho y, al no hacerlo, ha contraido graves responsabilidades con su pueblo y con la Historia. Es cierto ue el rey se siente amigo del presidente, pero esa amistad no beneficia a España, ni debe impedirle sus obligaciones como jefe del Estado y árbitro supremo. Su papel constitucional es de segundo plano y de prudencia, pero cuando la patria arde (y ahora está ardiendo por culpa de la persistente ineficiencia frívola de Zapatero), su deber es llenar el horrendo vacío y actuar en el primer plano para evitar la culminación del desastre.
Muchas menos razones para reir tiene Zapatero, un político fracasado, con uno de los índices de popularidad y aceptación más bajos de todo el Occidente desarrollado, que ha perdido la confianza, que es rechazado por su pueblo y que hoy constituye el mayor estorbo y el peor problema de España. Si hubiera sido demócrata y digno, habría asumido su fracaso y se habría marchado, convocando elecciones anticipadas, pero está demostrando ser un peligroso ventajista, un insensible y brutal dirigente político que, ignorando el bien común, renunciando a la grandeza y anteponiendo su interés al de la nación, ha decidido apalancarse en el poder "caiga quien caiga".
Los demás presentes en la foto tienen una responsabilidad secundaria porque únicamente son seguidores del inepto y nefasto presidente. Sin embargo, todos ellos tienen el deber de anteponer el bien común a sus propios intereses y a presionar a su líder para que deje de castigar a España, para que se marche y entregue al pueblo su derecho a decidir sobre un futuro que Zapatero y su corte han teñido de negro.