Cuando conocí a Carlos y Noelia, una tarde de invierno en la que quedamos para tomar un café, mis ojos no podían abrirse más del asombro.
Una boda medieval, me dijeron…pero ahí no queda la cosa porque teníamos varios grandes retos que incorporar, como que los novios querían que el evento fuera vegetariano (por conciencia, no por gusto) que el cóctel debía incluir pizzas argentinas (unas en particular que les fascinan y que, hemos de decir, que con toda la razón) y farolillos luminosos para finalizar el evento, además de íntimo y lo más inmerso en la naturaleza posible.
Con todo y con eso, un mix de lo más original, y después de muchas, muchas, muchas horas de pensar y buscar alternativas que cumplieran todos estos requisitos, la boda se desarrolló mágicamente trasladando a todos y cada uno de los invitados a la edad media donde nuestra princesa Noelia y nuestro príncipe Carlos se dieron el sí en una boda maravillosa y tematizada a tope…os dejamos con ella a ver que os parece!
Para empezar os dejamos con una vista general de la zona donde se realizó el banquete al atardecer.
Nuestra bella princesa llevó un diseño único que realizó nuestra maravillosa Charo, que ya ha vestido a alguna de nuestras novias y que fue diseñado con gran acierto siguiendo el sueño de Noelia, el cual supo ver y plasmar, dándole una forma única y perfecta.
El ramo, realizado por nosotros, con flores elegidas por la novia.
Los novios fueron recibidos por un caballero que les condujo al altar para que diera comienzo la ceremonia celta.
La ceremonia, recreada maravillosamente y amenizada por un grupo de música celta.
La decoración fue un trabajo conjunto entre nosotros y la compañía Teatro Destellos
¡La maravillosa ambientación y los trajes de los invitados nos trasladaron al medievo!
Durante el cóctel, asistimos a una representación por parte de la compañía, que nos hizo reír con una fábula divertida y entrañable tras el cual pudimos degustar las maravillosas pizzas hechas en vivo y directo y realmente deliciosas.
El banquete, vegetariano muy original, delicioso y sin ensaladas,lo cual era importante para los novios que así pudieron demostrar a todos los detractores del mundo veggie… ¡que hay vida más allá de la lechuga!
La tarta, preciosa y con todo lujo de detalles que daba pena comer.
Farolillos a lo largo del camino de la finca nos indicaban el camino a seguir para llegar hasta donde un grupo de música celta nos ofreció un concierto con el que todos los invitados bailaron y se divirtieron.
Para finalizar, una queimada con su conxuro incluído que despidió la noche mágica de la boda de Carlos y Noelia.
¿Que os ha parecido esta boda tan especial? ¡Esperamos que la hayáis disfrutado tanto como nosotros creándola!
Wedding planner y coordinación: Hapmaker Weddings
Decoración: Hapmaker Weddings y Teatro Destellos
Ceremonia: Teatro Destellos
Fotografía: Xavi Baeli
Cátering: Ve-Ga cátering
Mobiliario: Alquicátering
Cóctel: Groumet Pizza
Músicos: Matermonium
Tarta: Starcakes