J. A. MONROY
Advertencia: Esta carta la escribí en octubre del 2009. Saramago falleció en Lanzarote el 18 de junio último. Tenía 87 años. Después de su muerte “L´Osservatore Romano”, portavoz del Vaticano, publicó un vulgar artículo que destilaba ira y odio. Decía de Saramago lo que no tuvo coraje de decir cuando el Premio Nobel estaba con vida. La eterna Inquisición.
Don José: Media humanidad sabe quién es usted. La otra media no lee libros. Quiero curarme en salud. Podría ocurrir que esta revista cayera en manos de algún analfabeto literario, no necesariamente cultural, ignorante de su persona y de su sabiduría. Al efecto, recuerdo su trayectoria con breves pinceladas biográficas.
Nació usted en Portugal hace 87 años. Contrajo un primer matrimonio con Ilda Reis en 1944 y otro en 1986 con la periodista granadina Pilar Río, ahora traductora de su obra al castellano. Ha ejercido usted una prolongada labor periodística en diferentes medios. Ha escrito unos 40 libros. Es doctor Honoris Causa por 11 universidades, 5 de ellas españolas. Ingresó en el Partido Comunista Portugués en 1969. La Academia sueca le concedió el Premio Nobel de Literatura en 1998. Bien merecido. Más merecido que el que le dieron a Camilo José Cela por una producción literaria endeble.
Puede leer aquí el artículo completo de este escritor y conferenciante internacional de fe protestante titulado Carta a José Saramago