Permítame comenzar esta carta felicitándole por las grandes acciones que ha realizado en favor del Real Madrid. Solo los desagradecidos o los desmemoriados no han apreciado el enorme bien que hizo usted en su primera etapa en el Real Madrid, saneando económicamente el club y convirtiéndolo en uno
de los equipos de fútbol más rico del mundo. Su gestión económica ha sido muy beneficiosa para la entidad. Habrá quien piense que todo fue un pelotazo urbanístico del que usted se benefició, pero hasta que no se demuestre lo contrario, su gestión fue ejemplar. Es evidente que usted es un gran empresario, no en vano, fue elegido mejor empresario en 1999, es la décima fortuna en España y la 804ª del mundo según la revista Forbes.Pero, el fútbol, señor Pérez, no es una empresa. Y lo peor, ni siquiera es una empresa suya. El Madrid es un equipo de fútbol. Y pertenece a sus socios. No se puede convertir el Real Madrid en el cortijo particular de nadie. El dinero que usted gestiona no es suyo, es de los miles de socios, no lo olvide nunca. Su gestión económica puede ser inmaculada, pero su gestión deportiva es un auténtico desastre. El Real Madrid no es una máquina de hacer dinero —que también— es un equipo que se nutre de ganar títulos... y con usted, los títulos son escasos. Todavía nadie entiende cómo es posible que el entrenador que consiguió la Décima no continúe en el Madrid. ¿Tan poco crédito tenía? ¿No aprendió de sus errores cuando despidió a Del Bosque? Ha puesto al nuevo entrenador, Rafa Benítez, a los pies de los caballos. ¿O realmente piensa que la afición perdonará su primer tropiezo? ¿Sabe usted lo que significa la palabra planificación deportiva?Y lo que es más grave. ¿Dónde está el señorío del Madrid del que usted hace gala? Abochorna ver como grandes jugadores y entrenadores deben salir por la puerta de atrás. No es cuestión de organizar partidos homenajes. Es necesario que salgan como lo que son: Mitos. Este año, tras Ancelotti, ya ha conseguido echar a Casillas. Esperemos que alguien le pare los pies y no termine echando a Ramos. Por supuesto, mientras, en casa del eterno rival, el Barcelona, siguen acumulando éxitos. ¿Realmente no envidia la forma de salir del club de Puyol o Xavi? ¿Qué más le hace falta para irse del Real Madrid?Afortunadamente, cada día me alegro más de ser fiel seguidor del Racing de Santander.Piense.Sea bueno.Revista Opinión
Estimado señor Pérez: