Diciembre 25 de 2916
Sr. Raúl M. Castro Ruz,
Presidente del Consejo de Estado y del Consejo de Ministros de Cuba,
Presente.
Le escribo nuevamente con la esperanza de ser atendido y con mi deseo firme de que Cuba mejore para que las personas capacitadas puedan encontrar trabajos remunerados, para que se termine el acoso y la represión de unos cubanos a otros cubanos, y para que nadie desee buscar en el extranjero las oportunidades que puede y debe tener en nuestro país.
Su decisión de terminar más de cinco décadas de enfrentamientos y divergencias con los Estados Unidos de América y abrirse a negociar para regularizar las relaciones entre los dos países fue acertada y eso sin duda debe beneficiar a ambos países.
Ahora deseo invitarle a terminar otras cinco décadas de enfrentamientos y divergencias pero con sectores del pueblo cubano que no están de acuerdo con muchas de las políticas que el gobierno emanado de la revolución ha implantado.
Los cubanos que discrepan no son traidores a Cuba ni agentes del enemigo. Son personas que viven los problemas que el cubano común y corriente sufre a diario y tienen ideas para resolverlos. No pretenden privar al pueblo de su derecho a la educación o a un servicio de salud ni pretenden tampoco afectar a los trabajadores cubanos. No se trata de terminar con la justicia social.
Son cubanos, que no pertenecen al partido comunista, y desean organizarse y presentar opciones y alternativas a muchas de las políticas actuales, buscar que las mismas puedan discutirse públicamente y, de considerarse convenientes, implementarlas para mejorar a nuestro país, y hacer todo esto de manera pacífica. No es cuestión de combatir, ni de que haya muertos. Lo que desean es mejorar la vida de todos los cubanos.
Por eso le planteo que igual que usted está negociando con los Estados Unidos de América las diferencias entre ambos países, permita y promueva que también se negocien pacíficamente las diferencias que hay entre nosotros los cubanos. No se trata de mirar al pasado si no de planear un futuro promisorio para Cuba.
Le invito a promover un debate público, donde personas representantes de la disidencia, discutan con personas designadas por su gobierno, una agenda sobre la problemática cubana y que el pueblo tenga acceso, tanto en vivo como por la televisión, para que pueda hacer sus preguntas también. Atender las inquietudes del pueblo es fundamental para todo gobierno y el suyo no es la excepción.
También me permito sugerir que el Ing. Eliecer Ávila Cicilia,presidente de Somos+, represente a la disidencia pacífica y sea el coordinador de los debatientes que propondrán soluciones alternativas. Eliecer designará un grupo de 2 o 3 personas que le acompañarán en el debate con las personas por usted designadas aunque su presencia en el debate sería de agradecer.
El moderador sería escogido de común acuerdo, igual que la lista de temas a debatir.
Espero que acepte que se realice este debate y que los cubanos demostremos al mundo que podemos zanjar nuestras diferencias y encontrar soluciones a los problemas de nuestro país, sin la necesidad de que nadie nos diga lo que debemos hacer ni de seguir estrategias que otros países hayan utilizado. Los problemas cubanos deberán tener soluciones cubanas, y aquí tiene la oportunidad.
Atentamente,
Ing. Jorge Ros
Invito a TODOS los cubanos a apoyar y compartir esta iniciativa. Si el régimen aceptó reunirse con los Estados Unidos para zanjar diferencias, debe también hacerlo con la disidencia cubana.