Soy contrario a la publicación de las ‘Historias de la infancia de Stalin’. El libro está plagado de una masa de contra-verdades fácticas, de alteraciones, de elogios inmerecidos. Los aficionados a los cuentos, los narradores de bobadas (quizá narradores de bobadas de buena fe), los aduladores, han inducido al autor a error. Es una lástima para el autor, pero así son los hechos.
Pero eso no es lo esencial. Lo esencial es que el libro tiene tendencia a sembrar en la conciencia de los jóvenes soviéticos y de la gente en general, el culto a la personalidad, del jefe, del héroe infalible. Es peligroso y nocivo. La teoría del héroe y de la muchedumbre no es una teoría bolchevique sino eserista. Los héroes hacen al pueblo, transforman la muchedumbre en pueblo, dicen los eseristas. El pueblo hace a los héroes, responden los bolcheviques a los eseristas. El libro lleva agua al molino de los eseristas. Todo libro de este tipo llevará agua al molino de los eseristas, perjudicará nuestra causa bolchevique común.
Aconsejo quemar ese libro
Tomado de Juventud Comunista de Bolivia