Carta de una madre a su hijo

¡Hola!

solo quería escribirte lo importante que eres para mí y que:

Cuando necesites de alguien, aquí estaré.

Cuando quieras llorar, aquí estaré.

Cuando sientas rendirte, Aquí estaré.

Cuando te sientas débil y pienses que todo el mundo te cae encima, aquí estaré, para eso está mamá.

Cuando empieces a dibujar tu propio camino, estaré pendiente de ti, aunque creas que ya no me importas y que no me preocupas, directa o indirectamente estaré protegiéndote, ¿Sabes por qué?.

Porque desde que naciste, eres el mejor regalo que Dios pudo darme, no te lo voy a negar, al principio tuve mucho miedo, como toda mamá primeriza supongo, además que tu padre nos había dejado.

Pero cuando te pusieron en mis brazos y sentí de cerca tus manitas, y tus pequeños brazos intentaban abrazarme, me di cuenta que el miedo de tenerte se había ido por completo, ahora había llegado uno peor, el miedo a perderte.

Ahora estás creciendo y lo hiciste demasiado rápido, tal parece que fue ayer que celebré tu primer cumpleaños, te hice tu primer desayuno para la escuela y te puse tu primera corbata y debo decirte que estás listo para enfrentarte a esta selva de cemento, donde los malos intentan hacer caer al bueno.

No puedo evitar la nostalgia al saber que  te marcharás de mi lado y que tal vez me quede sola, sin embargo, debo aceptarlo, es parte de la vida y en serio estoy muy orgullosa en lo que te has convertido, tanto como la primera vez que salté de alegría cuando obtuviste tu primera victoria o cuando corriendo te acercaste a mi para brindarme un poco de tu helado.

Pero debo advertirte, no todo será color de rosas, te caerás una y otra vez y deberás levantarte, te lastimarán el corazón y tal vez no me lo cuentes por vergüenza, pero tranquilo es normal, aprenderás de cada una de estas cosas. En tu trabajo intentarán opacarte, no dejes que tu luz se apague, tampoco te aferres tanto a él, una vez que tengas familia, y que así será. Debes darte cuenta que la familia es lo primero, que tus hijos son tu pilar y tu esposa tu mejor amiga y cómplice.

Se que aún falta para que te cases, lo se, pero desde ya debes saberlo, ahora no me queda más que solo decirte que te amo mucho y que no hay otra madre más orgullosa que yo.

Espero que tu viaje sea lo más feliz posible y espero que jamás olvides, que pase lo que pase contarás conmigo para siempre.

Att: Mamá