La Casa de Silicona, al norte de Madrid, demuestra el gusto de los arquitectos por la naturaleza y por la apuesta por nuevos materiales. La intención fue llenar un hueco dejado por los árboles con dos plataformas que buscan el contraste con colores llamativos, y que ocultan la vivienda bajo el terreno. El interior son espacios vacíos que se comunican siempre con el exterior. Imagen: Selgas Cano Arquitectos.
+ INFO: Imágenes de la vivienda.
