CASA QUE GOTEABA SANGRE, LA (Mansión de los crímenes, la) (House that dripped blood) (Gran Bretaña, 1971) Terror

Director: Peter Duffell --- Intérpretes Principales: Christopher Lee, Peter Cushing, Denholm Elliott, Jon Pertwee, Joss Ackland, John Bennett. Chloe Franks, Tom Adams. Ingrid Pitt, Nyree Dawn Porter, Joanna Dunham, Geoffrey Bayldon, John Bryans., Hugh Manning, Robert Lang --- Argumento: Cuatro cuentos horroríficos relacionados por una vieja y fantasmal mansión en la que se realiza una investigación policial para esclarecer ciertas desapariciones. 1) METHOD FOR MURDER: Un escritor conjura desde su imaginación a un estrangulador y cual es su sorpresa cuando nota que el criminal ha tomado vida real.  2) WAXWORKS: Un hombre solitario visita un museo de cera y ve una figura que le recuerda a una mujer que amó en el pasado. El dueño de la exhibición es, además, un psicópata que va por ahí blandiendo su hacha...  3) SWEETS TO THE SWEET: Un hombre tiene una hija con "problemas", y la nueva institutriz descubre que sus dificultades vienen acarreadas por la afición de la chica a la magia negra, especialmente a su nuevo muñeco vudú, hecho a imagen y semejanza del padre.  4) THE CLOAK: Un pedante actor compra una capa para interpretar el papel de un vampiro, pero como la capa era de un vampiro verdadero, su propia conducta se ve afectada. ---
Mi opinión: Entretenida pero no demasiado buena película de la Hammer, de esas que tanto buenos rendimientos sacaron, sobre todo, en los años sesenta. Aquí todo es algo desigual, pero tienen un factor común: su no buena resolución de las cuatro historias. Con ello quiero decir que todas ellas están bien llevadas e interpretadas, resultan fascinantes por el propio argumento, pero acaban de forma insatisfactoria. Y por ello el espectador/a no puede decir que sea redonda, más bien desigual.

Preciosa fotografía en color y buena banda sonora. Amén de su plantel, claro, de lo mejor de la casa Hammer. Creo honestamente que hubiera requerido de un mejor realizador para plasmar con propiedad las diversas historias, pero se queda a medio camino del todo. Y así no deja el buen sabor de boca que se pretendía. Una pena.