Casacas militares

Un recorrido por la memoria de nuestra Historia nos evoca imágenes de mil y una contiendas...las tropas napoleónicas cruzando las orillas del Rhin, fusileros españoles defendiendo el sitio de Bailen bajo un sol abrasador, el regimiento de Húsares de la Princesa en las campañas de Marruecos, soldados imperiales atravesando la fría Polonia hacia Lodz, el Regimiento de Dragones de Lusitania frente a tropas austriacas, los elegantes artilleros al servicio de Luis XV...y entonces, es imposible no reconocerla al instante.Sin duda, la casaca militar es la prenda fetiche de la temporada: corta y ceñida, sin faldones. Realizada en sarga o terciopelo rojo, azul marino o negro; decorada en la pechera, cuello y bocamangas con trencillas, alamares o filigranas de soutache en blanco o dorado. Cerrada con presillas de pasamanería o botonadura doble. Inspirada inicialmente en el dolimán turco y en el uniforme de los jenízaros otomanos, su diseño definitivo se realizó a partir de las chaquetillas de los húsares al servicio de Luis XIV, para forma parte del uniforme de la infantería y de la caballería ligera de muchos ejercitos.Su poderosa imagen visual, mezcla de aristocracia decadente y romanticismo, sedujo en los '60 a los iconos del pop y del rock gracias a la revolución cultural del Swinging London y a "I Was Lord Kitchener´s Valet", una tienda de ropa situada en el barrio londinense de Notting Hill, que recuperó los viejos uniformes militares como prendas de moda. Ahora el recorrido por nuestra memoria visual revive a Jimmi Hendrix en el Monterrey pop festival, los Beatles en la portada del album "Sargent Peper", la imagen de Adam Ant en los '80, Prince, Axl Rose, Mick Jagger, y por supuesto, los pasos de baile de Michael Jackson.

Casacas militares